tag:blogger.com,1999:blog-26200479555551487012024-03-12T18:51:20.274-07:00''Stop! It's Tea Time''No podemos prometerte que siempre ganarán los buenos y que el bien prevalecerá, pero te podemos enseñar a sentir como nuestros personajes lo hacen.Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.comBlogger50125tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-66803277556800823492016-08-15T12:50:00.000-07:002016-08-15T12:50:56.247-07:00En la sangre<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
No es el rencor del acero
lo que mata,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
ni siquiera las ganas</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
locas</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
de huir.</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
Son los pasos tejidos
en torno a</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
nuestro cadáver,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
las luces</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
apagadas en el
dormitorio,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
tus camisas nuevas</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
como alfombra</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
para mis tacones y</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
tu perfume</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
de cadáver florido.</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
No son nuestros
cuerpos enterrados,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
es la carne</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
puesta a secar</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
como las sábanas</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
los domingos de</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
misa.</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
No son nuestros hijos
malditos,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
es el vientre</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
profano e</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
infértil,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
es la madre</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
del monstruo
eléctrico</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
que te mata,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
a ti,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
al padre.</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
No es la sagrada
familia,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
es la vergüenza</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
del terreno</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
baldío</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
y la sed</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
de la herencia</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
bautizada.</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
No soy yo ni eres tú,</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
es el bestial</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
asesinato</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
de la</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
inmortalidad.</div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<a href="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: justify;"><img alt="Licencia de Creative Commons" border="0" src="https://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="background-color: #291205; border: 0px; color: #766e5f; font-family: georgia, utopia, "palatino linotype", palatino, serif; font-size: 14px; line-height: 22.4px; list-style-type: none; margin-top: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: left;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-880593996777644792015-12-16T11:40:00.000-08:002015-12-16T13:13:49.629-08:00Campbell's<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfaDCu7SKtBnd63tQFc-IFsYEsZ89Blzm1K1bTnP_Kie-zh38Gro-CRKkm5oX0qgUvcpXPNFKY2MEQ72rgfNUE-6tO5PtbehegUZMWsidK4IXerpv_hfbLOk4HXW7YlnVK9NNluL7Af2U/s1600/campbells3.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfaDCu7SKtBnd63tQFc-IFsYEsZ89Blzm1K1bTnP_Kie-zh38Gro-CRKkm5oX0qgUvcpXPNFKY2MEQ72rgfNUE-6tO5PtbehegUZMWsidK4IXerpv_hfbLOk4HXW7YlnVK9NNluL7Af2U/s320/campbells3.jpg" width="227" /></a></div>
Como cada día a las dos y media el olor a sopa de tomate
invade la casa. Sopa de tomate de lata, por supuesto, ya que ella no tiene ni
idea de cocinar. Comemos esa especie de líquido menstrual todos los días, sin
cansarnos de él pues le tenemos aprecio, pero aburridos de su sabor artificial.
Y es que Helena aborrece la cocina. Sí, es así, debe ser la única ama de casa
americana que no cocine. Pero quizá es mejor. La última vez que lo intentó
quemó un pollo hasta tal punto que creí poder convertirlo en diamante. Por eso le tenemos tanto cariño a la comida
prefabricada, la que evita que nos muramos de hambre. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Estoy sentado en el sofá que cogimos de la casa de la abuela de Helena cuando se fue a la
residencia. Ella misma dijo que podíamos quedárnoslo, o al menos eso entendimos. Bueno, el hecho es que
estoy aquí sentado, con el culo pegado al cuero y sudando como un cerdo. Hace
un calor insoportable. No tenemos aparato de aire acondicionado por supuesto,
mi sueldo no da para más como me recuerda Helena siempre, y un nimio ventilador
eléctrico es el encargado de evitar que me derrita sobre este sillón. Es
gracioso ver como esas aspas tan pequeñas giran deprisa, haciendo un esfuerzo
inhumano por expulsar algo de aire. No entiendo como no es el ventilador el que
rompe a sudar. Supongo que estará acostumbrado a esto, a que le fuercen mas
allá de su capacidad. Tiene práctica. Otros no tenemos tanta suerte. Suerte no,
pero hambre sí. Y no es que me entusiasme la sopa, pero solo el olor ha hecho
que me ruja el estómago. Rugidos que parecen decir que lo alimente, que eche
leña al fuego. Ufff... fuego, no por dios, no con este calor. El infierno en la
tierra y yo esperando en este sofá anticuado, hay que joderse... Cuarenta
grados a la sombra dice el hombre del tiempo. Seguro que ese no tiene que
sufrirlos. Me apuesto lo que quieras a que sí que tiene aparato de aire
acondicionado, Helena estaría contentísima con él. Así no tendría que
despreciar a mi pequeño ventilador. Pobrecillo, con lo que se esfuerza. En fin,
que tengo hambre, mucha. Y Helena sigue metida en la cocina, como siempre. El
reloj de pared lleva tiempo parado, me he fijado en que las manecillas no se
mueven desde hace rato. Se han quedado ancladas en las dos y media, ahora
tienen que ser cerca de las tres menos cuarto, calculo que todavía queda media
hora para comer. Tres y cuarto, la hora de siempre. Y creo que aunque la comida
ya esté hecha antes de esa hora Helena espera hasta y cuarto, seguro. Solo para
fastidiarme. Sabe que estoy famélico pero ella no me alimenta, no, no lo hace. ¿Puede
llamarse alimento a esa asquerosidad de sopa?</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Cada vez siento las axilas más húmedas. Y noto como gotas de
sudor caen de mi frente y se estrellan contra el cuero. La calle está desierta, se puede ver desde
aquí, a través de la ventana. Ni un alma. Tenemos la casa plagada de ratas y ni
siquiera ellas se atreven a asomar el hocico hoy. Demasiado calor ahí fuera.
Tiene que ser como una cámara de gas, asfixiante. Hay que tener valor para
salir ahí, y yo no lo tengo desde luego. Lo que tengo es hambre. ¿Cuándo me
llamará Helena? Si que tarda sí. Estará hablando con su madre. Esa bruja. Nunca
quiso que se casara conmigo. No lo ha dicho abiertamente, pero yo lo sé. ¿Por
qué si no iba a venir a "visitarnos" un día sí y otro también? Quiere
controlarlo todo, que agobiante. La tenemos encima continuamente. Aunque hoy no
ha aparecido todavía. Es raro, suele venir justo cuando estamos comiendo. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
¿Por qué me casaría con esta mujer? El día de nuestra boda
hacía un calor insoportable, como hoy. Llevaba el chaqué empapado y el pelo
grasiento porque el sudor se mezclaba con la gomina barata. Pero es que Helena
no estaba mejor: llevaba el vestido con el que se casó mi querida suegra, y que
había sido de su abuela o algo así. Se le rompió al subir al altar, creo que se
pisó la cola con un zapato o se le enganchó en un escalón, una cosa de esas. El
hecho es que la gente no se rió por prudencia, pero vamos, todos lo habían
notado. Cuando destapé el velo para besarla me encontré con un tomate, así de
roja estaba Helena. En el fondo me casé con un tomate, lo tengo claro.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Mi hambre aumenta y el hombre del tiempo no se calla. ¿Cuánto
duran estos noticiarios? Parece que llevo viéndolo toda la mañana, madre de
dios... Otra vez con lo mismo de los cuarenta grados a la sombra, ya te he
entendido palurdo, muchas gracias. "¡Helena!" Grito y ni caso. ¿Éste
sofá cada vez se está hundiendo más o me lo parece a mí? Creo que al final voy
a tener que levantarme e ir a ver qué pasa, no es normal que tarde tanto en
preparar una maldita sopa prefabricada.
Me siento pegajoso, quizá debería darme una ducha de agua fría, me
vendría bien. Me cuesta respirar, que agobio de tiempo, es como denso. Estoy
harto.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Helena joder, ¿qué estás haciendo?. Lo único que siento es
calor y hambre, por lo demás me encuentro bastante bien. Pero es como si
tuviera un hueco en el estómago, lo que daría ahora mismo porque la sopa
estuviese ya preparada. Ahora que lo pienso, no recuerdo que he hecho esta
mañana. Creo que hoy es domingo. ¡Bah! Seguramente haya estado en este sillón
todo el puto día. ¡Claro! Helena habrá ido a misa, por eso tarda tanto. Cree
que por rezar se va a convertir en una buena esposa, cuando a su marido lo
tiene muerto de hambre. Cuanta hipocresía. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Fuera sigue sin verse a nadie. Las plantas del jardín se
están marchitando, es este insoportable calor tan repentino, lo quema todo.
Hace unos días el tiempo era diferente, no sé qué coño pasa en el mundo últimamente,
lo mismo hace frío que de pronto estamos
así, chorreando. Qué asco. Voy a ir a la cocina de una maldita vez, aunque haya
ido a la iglesia no es normal que tarde tanto. Voy a exigir mis derechos, tengo
derecho a mi sopa de tomate y la quiero ya.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
¡Hostia! El pomo de la puerta está ardiendo. Deberíamos
haber cambiado esta mierda de tiradores de metal, se calientan demasiado en
verano. Se lo habré dicho mil veces a Helena, pero claro, ni caso. Al menos no me saldrá ampolla ni nada, parece
que no me he hecho ninguna señal, curioso. <br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
"¿Helena? ¿Dónde cojones está mi sopa, sabes qué hora
es?" Pero ¿Cómo lo va a saber? El reloj de la cocina tampoco funciona,
aquí también son las dos y media. Aun así parece que no me ha oído, no está
donde debería estar: enfrente del fuego calentando mi comida. Ese es su sitio,
siempre lo ha sido. La cocina parece una cueva con las persianas bajadas, hay
un bote con algo blanco sobre la encimera. Es el mata ratas en polvo que compramos a granel, sin esto
esta casa sería todavía más asquerosa. Qué raro que Helena lo guarde aquí, debería estar en el sótano, ya hablaré
con ella. ¿Pero dónde se ha metido esta mujer? Seguro que en el comedor, ahí es
donde suele ponerse a hablar con su madre por teléfono, para que yo no la
escuche. Que hija de perra...</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
La mesa del comedor, donde almorzamos diariamente, está
ocupada. Hay dos personas sentadas. La comida ya está servida y los cubiertos
dispuestos. ¡Mi sopa de tomate! ¡Por fin! Uno de los comensales es Helena, está
en el lugar de siempre, lejos de mi sitio, no me gusta que coma junto a mí, me
recuerda a un cerdo en una pocilga, carece de modales. Tiene la cabeza hacia
atrás, casi colgando, y un agujero en ella a través del cual se ve el horrible
papel de pared -que ella eligió- manchado de sangre. Tiene una pistola en la
mano. La otra persona se sienta a la cabecera de la mesa y soy yo. Tengo la cara
sumergida en el plato, qué guarrada. Mi mano, lo que agarra, es una cuchara. En
el suelo hay una lata, es de sopa de tomate Campbell's. Parece que hoy me quedaré
con hambre. Este tiempo no es normal, hace demasiado calor últimamente.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Licencia de Creative Commons" border="0" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="background-color: #291205; border: 0px; color: #766e5f; font-family: Georgia, Utopia, 'Palatino Linotype', Palatino, serif; font-size: 14px; line-height: 22.4px; list-style-type: none; margin-top: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: left;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-1536723609478642762015-11-28T05:44:00.000-08:002015-11-28T05:44:34.202-08:00Hechizo de amor para cuerpos jóvenes.<br />
<div class="MsoNormal" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
Los cuerpos, juntos,
inseparables, descansaban plácidamente sobre la cama, que podría haber sido el
mar. Como dos náufragos que se agarran al tablón que será su salvavidas, ellos
se abrazaban en la inmensidad de la llanura blanca, rezando porque ese momento
no acabara nunca. Eran uno solo, eran el sueño y la vigilia, eran la noche y el
día, eran la ciudad y el bosque; lo eran todo. Dos hombres que se aman y
duermen, dos hombres que se han amado y descansan. Era curiosa la forma en la
que las caderas de uno encajaban con la curva perfecta de la espalda del otro,
unidos así en sagrada comunión, convirtiendo sus cuerpos en el cuerpo del dios,
que los miraba con envidia. En esa cama, en ese mar, en esa llanura y aun en
ese universo intrincado de almohadas planetarias y movimientos orbitales,
pasaba el tiempo. Les atacaban los años y se marchaban vencidos, la nieve
llegaba a sus cabezas y reposaba tranquila, las arrugas de las sábanas se
convertían en las de la piel, la forma de sus cuerpos en el colchón se fosilizaba
y el latido de sus corazones menguaba y se relajaba. Todo esto no les afectaba,
ellos estaban más allá de cualquier horario, porque el tiempo del amor es, sin
duda, incomprensible para cualquier reloj. Basta decir que uno de ellos movió
un brazo y así pasaron diez años. El otro dobló un poco más la pierna
izquierda, y retrocedieron veinticinco años. Volvieron a su infancia y
avanzaron hasta su vejez, todo esto mientras buscaban la posición perfecta.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
Juntos, juntos, juntos...era el
eco silencioso que se repetía en todos los lugares. ¿Dónde estaban ellos cuando
se amaban? ¿A dónde iban cuando se sentían? Quizá a ese lugar comprendido entre
el otoño y el invierno, entre una palabra y otra, entre el cielo y la tierra o
entre una lágrima de tristeza y otra de alegría. Eran ambos todos los lugares y
eran sus pieles todas las fronteras. Los ojos cerrados los volcanes inactivos,
las bocas abiertas las fallas y cañones, el torso la gran estepa libertadora y
el sexo el único paraíso verdadero. Su
amor tectónico quedaría grabado en el atlas de sus vidas que juntos, juntos,
juntos, terminarían por cerrar.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
Y así, una vez más, el mundo
quedó en silencio. Nada tenían que decir el resto de los hombres, nada nuevo
podrían añadir. Todo estaba dicho, todo estaba hecho. Aquellos jóvenes, viejos,
viajeros, filósofos, poetas, que se abrazaban, que se atrevían a sentirse y a sentirnos, nos miraban con los
ojos cerrados y sin emitir palabra alguna decían: "Este es mi cuerpo,
sangre de la alianza nueva y eterna que será entregada por vosotros".</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
Comamos y bebamos todos de él.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<a href="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Licencia de Creative Commons" border="0" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="background-color: #291205; border: 0px; color: #766e5f; font-family: Georgia, Utopia, 'Palatino Linotype', Palatino, serif; font-size: 14px; line-height: 22.4px; list-style-type: none; margin-top: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: left;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-64673416787658121542015-09-01T08:01:00.000-07:002015-09-01T10:22:34.061-07:00Memoria -Últimos días- (#ProyectoParaDos)<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt;">
<div style="text-align: center;">
[Estos son los últimos días del relato titulado Memoria que he escrito junto con <a href="https://twitter.com/MisoraArosim">Juls García</a>. Ha sido una experiencia increíble trabajar con ella, y espero que lo disfrutéis tanto como lo hemos hecho nosotros.</div>
<div style="text-align: center;">
Para leer los primeros días de esta historia id al blog de Julia: <a href="http://explosionesenlacabeza.blogspot.com.es/">Explosiones en la cabeza</a>.]</div>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="font-style: italic; font-weight: bold;"><br /></span></div>
<b><i>19 de noviembre.</i></b></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify; text-indent: 36.0pt;">
<div style="text-align: justify;">
No sé bien cómo
narrar los sucesos ocurridos hoy ni cuánto tiempo ha pasado desde que he
llegado a mi habitación. Ni siquiera sé cuántos minutos llevo sosteniendo la
pluma a milímetros del papel, pensando sin cesar en las palabras adecuadas,
aquellas que mejor describan lo que siento, lo que ha pasado entre estos muros
que ahora me parecen tan diferentes. Es el mismo lugar que me intrigaba, son
los mismos pasillos interminables, las mismas salas desiertas con los mismos
muebles, las mismas obras de arte insulsas y aterradoras, hasta el aire tiene
que ser el mismo que respiré el primer día. Aun así todo ha cambiado, nada se
percibe de la misma forma. He viajado a una realidad paralela que trata de
engañarme, intentando hacerme creer que todo sigue igual. Pero después de lo
que ha sucedido esta mañana no puedo fingir que nada ha cambiado.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Las horas de la tarde han pasado
como si no hubieran existido, y me han trasladado hasta ahora como si el tiempo
hubiera dado un salto desde que, bebiendo un trago de vino en el comedor
principal a la hora de comer, me ha parecido ver una figura a través del
cristal de la copa. He pensado, en principio, que se trataba de la mujer del
otro día, pero al dejar la copa sobre la mesa, he descubierto a alguien… o algo
totalmente distinto.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Un hombre de aspecto joven se
apoyaba en la mesa. La palma de la mano izquierda extendida sobre la madera
oscura, en la mano derecha un objeto. Lo que en un principio deduje como algo
inerte hizo un pequeño movimiento, se agitaba levemente en el puño del hombre.
No me hicieron falta más segundos para darme cuenta de que se trataba de un
pájaro, un jilguero probablemente. Él lo miraba con pasividad, casi sin
prestarle atención. He podido apreciar los músculos del hombre tensándose bajo
su <b><u>piel</u></b> cuando el jilguero
intentaba zafarse. Finalmente, ha roto su cuello. Ha sido tan inesperado que me
he atragantado. ¿Qué sentido tenía mostrarme esa imagen?<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Es muy sencillo morir - ha dicho
con voz tranquila, abriendo la mano. El animal parecía casi dormido, pero sus
ojos carecían del brillo de la vida, igual que los orbes oscuros del hombre
cuando me ha mirado, dejando caer el cadáver del pájaro al suelo, y ha dicho -
Por favor, sígueme.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Me he levantado como un autómata.
Mis músculos no obedecían a ningún estímulo cerebral, actuaban impulsados por
algo muy diferente, algo que ya no me pertenecía. Mi cuerpo entero ha obedecido
a su petición. Me he sentido desde fuera siguiendo a aquel personaje por la
casa, fija mi mirada en su espalda. Me daba la sensación de estar caminando
solo, aunque tuviera la vista clavada en su camisa blanca y supiera con certeza
que, de alargar el brazo, podría tocarle sin problemas. Era como si su
presencia fuera imperceptible, como si careciera de algo vital que nos hace
reconocer y sentir a otros incluso sin verlos.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Finalmente, hemos llegado a una
puerta cerrada que ha abierto él con una llave que colgaba de su cuello. Le
seguí por unas oscuras y angostas escaleras de escalones desgastados, con la
piedra hundida allí donde otros pies, lejanos en el tiempo, subieron y bajaron
numerosas veces, como ahora lo hacíamos nosotros - ¿cuánto tiempo lleva
construido este lugar? -.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Entramos a una sala con planta de
cruz latina, como las iglesias convencionales, aunque me temo que es lo único
convencional. En la nave central no hay bancos, como cabría esperar, sino que
varias figuras flanquean los costados hasta el ábside. Son representaciones de
antiguos dioses paganos griegos y romanos. Estatuas de mármol blanco que te
miran mientras avanzas, recordándote que ellos fueron dueños del mundo hace
milenios y que tú eres simplemente una mota de polvo entre tantas. Miraba
sobrecogido en todas direcciones mientras mis piernas caminaban. Llegar al
crucero solo hizo que sintiera que mi psique se desmoronaba. Era incapaz de asimilar
todo lo que estaba viendo. Por encima de mí se alzaba una cúpula perfecta que
me situaba en el centro de miles de personas pintadas que me miraban. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigP8nCATjksdmltX9YDk9XMYJE3DttVRiPN6CES5Nb0Sdh_USZvnwRtJ2t38FRJ6KBMDzQYrHtx3tS2XETR9JiNlqg3oAGhZvb87GRZQpviSGlTQdJpm7pp8iYNesJgS5Ii9YYqVz8MSA/s1600/canael+fallen+angel+detail.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigP8nCATjksdmltX9YDk9XMYJE3DttVRiPN6CES5Nb0Sdh_USZvnwRtJ2t38FRJ6KBMDzQYrHtx3tS2XETR9JiNlqg3oAGhZvb87GRZQpviSGlTQdJpm7pp8iYNesJgS5Ii9YYqVz8MSA/s320/canael+fallen+angel+detail.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
Estaba desnudo ante ellas, se reían
de mí. Sus cuerpos pigmentados eran perfectos, el mío un desecho escuálido y
penoso. Sus ojos estaban fijos en cada pliegue de mi piel, me juzgaban y
decidían mi destino como inquisidores implacables que me conducían al cadalso.
Traté de fijarme en otro punto totalmente opuesto, pero sólo encontré la
desolación de un gran Buda que sentía lástima por mí. Su rechoncho cuerpo de
bronce era incluso más puro que mi alma, cada detalle de su vestimenta más
elevado que mi propia existencia. Giré sobre mí mismo y en el lado opuesto me
di de lleno con un ejército de seres aterradores tejidos en un tapiz de grandes
dimensiones. Demonios de caras rojizas, colmillos punzantes y cuernos
retorcidos peleaban con seres azulados y demenciales. Criaturas de diez brazos
que agarraban cabezas humanas goteantes, que pisaban cuerpos desmembrados y se
bebían la sangre caliente de los muertos. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Caí de rodillas extenuado, incapaz
de soportar todas esas imágenes. Luché para impedirme seguir mirando, pero mi
mente ya no era mía y levanté la cabeza del suelo sólo para encontrarme con el
último de todos mis jueces: un Cristo crucificado lloraba por mí, los brazos de
madera parecían querer abrazarme y yo le miré, le miré porque era mi única
salvación, le miré porque mis pecados pesaban y resultaban insoportables.
“¡Acaba ya con este dolor! ¡Mátame si es lo que deseas! Pero devuélveme todo lo
que me has arrebatado. ¡Dime qué hago en este lugar!” le gritaba sin emitir
sonido alguno, pero yo sabía que me escuchaba, era consciente de que en ese
momento el universo entero se limitaba a Él y a mí. Y junto a su dolorosa
figura, otra estatua que transmitía la tristeza más lacerante: su madre. La
Virgen María no contemplaba a su hijo en la cruz porque lo tenía arropado entre
sus brazos. El tiempo había avanzado, Jesús había descendido de su calvario y
su cuerpo sin vida reposaba plácidamente. Era una piedad angustiosa pero
tierna, que guardaba todo el sufrimiento del mundo y me lo transmitía de forma
sosegada, como diciendo “así es la vida de los mortales”. Y entonces supe que
me había roto. Todas mis defensas se quebraron definitivamente y no pude más
que desviar mi rostro hacia el hombre que me había llevado hasta allí.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Me miraba igual que al jilguero, con
absoluta pasividad. A pesar del temblor de mis manos, de las lágrimas que
apenas podía contener, de que con toda probabilidad mi imagen debía ser
indefensa, capaz de generar algo de clemencia o preocupación en cualquier ser
humano… él me miraba como si no fuera nada, absolutamente nada. Me sentí
pequeño, inútil, estúpido… irrelevante.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Se acercó a mí con una tranquilidad
que sigo sin comprender y dijo en el mismo tono que en el comedor:<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Las preguntas que consumen tu mente
las tuve yo hace… tiempo - esbozó una débil sonrisa, divertido - Las iré
respondiendo poco a poco, día a día, en esta capilla, hasta que considere que
estás preparado. Ya sabes cómo llegar. Habrá una copia de la llave en tu cuarto
cuando vuelvas.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-¿Preparado para… qué? - pregunté
notando mi voz temblorosa como pocas veces.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Para ser el siguiente.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-¿El siguiente en qué? - comencé a arrastrarme
hacia atrás, huyendo de él - ¿Qué pretende hacer conmigo?<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-El siguiente en guardar la memoria
de la humanidad.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-¿Y qué le hace pensar que me
quedaré para hacerlo?<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Temes a la muerte como cualquier
otro ser vivo. Te quedarás, no tengo ninguna duda.- contestó, acercándose a mí
con calma mientras yo seguía arrastrándome hacia atrás. Mi espalda topó con la
pared cuando formulé la siguiente pregunta:<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-¿Acaso va a matarme si trato de
huir?<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Por favor - su tono sonó ofendido
un instante - Para huir es necesario estar encerrado, puedes irte si quieres,
pero sé que no lo harás.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-¿Y por qué está tan seguro?</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Porque para ti guardo la victoria
frente al único enemigo que tu especie nunca vencerá - se acuclilló frente a
mí. Su mirada oscura parecía llegar a los secretos mejor guardados de mi alma,
como si ya me conociese de antes, como si me hubiera observado desde el día en
que nací - Puedo ofrecerte la inmortalidad.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<b><i><br /></i></b></div>
<div style="text-align: justify;">
<b><i>25 de noviembre</i></b><o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Durante
este tiempo he ido diariamente a la capilla a recoger los fragmentos de mi
alma. El que se ha convertido en mi mentor me ayuda con este proceso, aunque al
mismo tiempo, siento que la propia capilla, con todas sus figuras, comienza a
ser un apoyo. Hoy, incluso, he pasado algunas horas solo allí, observando al Buda,
el Cristo, la piedad… y los he sentido cercanos.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Cuando algo se destruye, es posible
reconstruirlo, pero ahora hay piezas que no encajan. Mi mentor se encarga de
rellenar los huecos que quedan vacíos en mí, o de desechar aquellos pedazos que
ya no necesito. El aprendizaje es arduo, pues se trata de dejar atrás todo lo
que soy y convertirme en algo nuevo. He de renacer como un fénix y aprender a
vivir otra vez. Soy como un niño, aprendiendo a dar sus primeros pasos, a decir
su primera palabra, a elaborar su primer pensamiento lógico. La figura de mi
mentor se comporta como un padre benevolente, que con paciencia, guía el
comienzo de mi nueva vida.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Son muchas las cosas que no
comprendo. Como médico, sé que todo tiene un principio y un fin, que ningún ser
vivo es eterno, y ahora me encuentro ante un horizonte infinito. No hay nadie
que me espere para llevarme al otro lado, no hay paraíso ni infierno para mí.
Me prometen que la esquelética figura con guadaña nunca me molestará.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Esto es lo más difícil, aunque hay
otras cosas. Soy el heredero de la vida de mi mentor y de muchos otros antes
que él. Soy el siguiente. He de continuar con una tarea fundamental que he
comprendido hoy mismo. Hablando con él, con los ojos a su altura, uno frente al
otro, me ha dicho:<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Me dedico a observar. He recorrido
durante siglos las mismas calles. He visto nacer y morir a muchos. Las ciudades
cambian al ritmo de la humanidad, aunque los actos se repiten. La miseria del
hombre se iguala a su esplendor. Las escenas más cruentas no son mayores que
las más tiernas. Mientras cientos de soldados mueren en batallas, cientos de
madres abrazan a sus hijos. El hombre ama y odia de la misma manera. Estos
hechos se suceden en el tiempo mientras yo me mantengo. A distancia, contemplo
y guardo.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Pero, ¿de qué sirve observar si no
intervienes? ¿Qué sentido tiene, por ejemplo, ver a un asesino acercándose a su
víctima y no salvarla?<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Mantener la memoria de este mundo
tan terrenal sin cambiar los hechos. Ese es el sentido, ya que las cosas
han de suceder. Se llama libre albedrío y contra eso nadie puede hacer nada. Es
un don concedido a vuestra especie, no tenéis un destino que os ate, ningún
hado que os marque un camino del que no podéis salir.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Entonces, una sombra ha recorrido su
mirada, oscureciéndola más aún. Ha bajado la vista al suelo y ha continuado
hablando:<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-He cogido demasiado cariño a esta
especie que antes sólo observaba. He entrado en sus juegos, me he rodeado del
calor de sus individuos, he imitado su comportamiento, llegando a olvidar mi
tarea en ocasiones. Igual que tú, estoy cambiando. Por eso estás aquí.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Para seguir sus pasos, es necesario
que destierre todo lo humano que hay en mí. En principio puede parecer
complicado, pero si lo pienso, ya había iniciado este viaje hacia tiempo. Todas
las operaciones, todos mis pacientes, la cercanía constante a la muerte me
habían preparado para esto. Quizás por eso he sido elegido. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; text-align: justify;">
<br />
<!--[if !supportLineBreakNewLine]--><br />
<!--[endif]--><o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<b><i><br /></i></b></div>
<div style="text-align: justify;">
<b><i>30 de noviembre</i></b><o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Qué
lejanas parecen mis anteriores palabras, escritas hace menos de un mes, pero
pertenecientes a alguien totalmente diferente. Mi cuerpo es el mismo, pero algo
se ha ido para dejar espacio a algo nuevo. Me siento ligero, joven, fuerte…
aunque vacío. Tendré que acostumbrarme a esta nueva sensación. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Escribo la última página de este
diario, pues cuando ponga el punto y final, lo llevaré a la biblioteca y lo
colocaré en el lugar que le corresponde. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDxSrGOzlsSL-Q8XgBJSVSnpiUdp_YENJeZ79rlxo0itkNdK1SH4pawUcsPBBXivGUygvX2FcYVe2oIh4_mwX_YrpS7Lm8GZI9DXGOB0HLIk0IZ9lYpAaWcXgQX0OZWYaNmCdQDNoD_Ac/s1600/tumblr_m3gun3WjJ81rszn7ao5_1280.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDxSrGOzlsSL-Q8XgBJSVSnpiUdp_YENJeZ79rlxo0itkNdK1SH4pawUcsPBBXivGUygvX2FcYVe2oIh4_mwX_YrpS7Lm8GZI9DXGOB0HLIk0IZ9lYpAaWcXgQX0OZWYaNmCdQDNoD_Ac/s320/tumblr_m3gun3WjJ81rszn7ao5_1280.jpg" width="213" /></a>El que ha sido mi guía y amigo
durante estas semanas, se ha despedido de mí entre las estanterías repletas de
memoria. Hemos entrado juntos y me ha hecho mirar cada uno de los volúmenes que
allí descansan. Los libros se extienden desde el suelo hasta el techo,
cubriendo las paredes como si fuesen <o:p></o:p></div>
un gran tapiz, invadiendo cada rincón de
la vasta biblioteca. Como una plaga, dominan el lugar. Me pregunto si podré
leerlos todos. Desde luego, siento curiosidad por la historia desconocida que
guardan en sus páginas. La esencia del ser humano recopilada en palabras que
narran su día a día. Este tesoro será el que los salve del olvido. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Todo lo que aquí ves es la razón de
tu estancia en este lugar y de tu futura existencia - me ha dicho - Ya sabes
todo lo que has de saber. Sólo nos queda hacer el intercambio.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-¿Intercambio? - he preguntado. Y
esas han sido mis últimas palabras como mortal.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
-Claro. Tú eres mi heredero, pero yo
soy el tuyo. Yo te daré la inmortalidad, pero alguien tiene que continuar tu
vida hasta el final. Así, podré morir, por fin. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Puso sus manos calientes con cuidado
sobre mi cuello, como hiciera con aquel jilguero, y al igual que ese día, me
sorprendió. Acercó su rostro al mío, deprisa, casi con ansia, y antes de que
pudiera hacer nada, sentí sus labios sobre los míos. En principio no reaccioné,
pero enseguida me vi arrastrado por algo incontrolable. Algo fluía de mí hacia
él, y de él hacia mí. Cada movimiento de nuestras bocas cedía ese algo al otro
y la fuerza que siento ahora, la juventud, la ligereza, se fue instalando en
mí, dejando tras de sí el vacío.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Cuando se separó de mí, sus ojos ya
no parecían tan oscuros. Nos miramos unos instantes y supe que sentíamos lo
mismo. Habíamos cambiado. <o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
Sin decir nada más, caminamos juntos
fuera de la biblioteca. Recorrimos todos los pasillos, siendo ahora nuestros
pasos los que llenaban su espacio, nuestras respiraciones las que resonaban en
cada recoveco, nuestras miradas las que recorrían las obras de arte. No me
sentí, sin embargo, un extraño.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Le acompañé por el jardín hasta la
puerta exterior, y allí le vi por última vez, alejándose por el mismo camino
que me trajo hasta aquí. Me di la vuelta, entonces, para observar la casa unos
instantes. Luego entré, sabiendo que no volvería a tener <b><u>noticias</u></b>
de él.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" /></div>
<div>
<br /></div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-28261285974654770932015-08-30T11:30:00.001-07:002015-08-30T17:48:31.130-07:00Love.<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
Una silueta femenina mira a
través de una ventana en una habitación oscura. Alguien la observa desde atrás.
Es de noche. Las farolas del exterior transmiten una luz amarilla, como de pus.
En el cuarto hay una cama y está
desordenada, las sábanas hechas jirones cuelgan como trozos de carne en un
matadero y las almohadas, acuchilladas, están vacías de plumas. Hay sangre seca
por las paredes.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Nunca supimos estar juntos. Lo
hemos intentado y siempre acabamos igual.- La mujer sigue mirando la calle a
través del cristal.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Tú te empeñaste, yo sabía que
era imposible. Nunca me haces caso.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-¡Así que es eso! La culpa
siempre la tengo yo ¿no?- Se da la vuelta y encara al hombre que tiene
enfrente.- ¡Tú fuiste quien iniciaste este juego macabro! ¡Yo tenía una vida!</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
El hombre se peina el pelo hacia
atrás con la mano, se queda callado, observando, y dice:</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Tú me seguiste. Al principio
esto te parecía bien. Te advertí y aun así continuamos. Ahora ya no hay vuelta
atrás.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-No...no sé qué va a pasar ahora.
¿Qué va a pasar Rick? ¿Lo nuestro ya se ha acabado? Dímelo tú por favor. Yo te quiero
y no quiero perderte. Por favor Rick, por favor...</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-No, no, tranquila. Creo que lo mejor es
que nos separemos. Al menos por un tiempo. Déjame limpiar todo esto y veremos
qué pasa después. Solo nos queda rezar.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-No quiero que nos cojan Rick.
No. Si lo hacen nos separarán para siempre y no podría soportarlo, no podría...</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
Rick avanza hacia ella. Un
cuerpo sin vida, el de una mujer, se interpone entre ellos. Lo sortea pasando
por encima. Cuando llega junto a la ventana la coge por la cintura y la mira
directamente a los ojos.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Lo sé preciosa, pero es
necesario. Esto se nos ha ido de las manos. Y no nos van a coger, no te
preocupes. Pero para que eso no ocurra debemos separarnos.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Yo solo quería complacerte.
Haría todo lo que me pidieras ya lo sabes. Pero tienes razón, quizá esto es
demasiado.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-No llores. Sé que todo lo
hiciste por mí. He pasado el mejor año de mi vida desde que te conocí. Y créeme
que lo que ha ocurrido esta noche ha sido la hostia. Pero si queremos que lo nuestro
siga debemos pasar un tiempo alejados el uno del otro. ¿Comprendes?</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Sí, sí, claro, entiendo.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Pues ya está. Ayúdame a limpiar
todo este desastre. Coge el ácido de la mochila mientras llevo el cuerpo a la
bañera. Se buena, pequeña.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
Rick se echa el pelo hacia
atrás, se agacha y con cara de esfuerzo coge el cadáver por los hombros. Lo
arrastra varios metros por la habitación dejando un sendero de sangre. Al girar
hacia el baño golpea una mesilla y cae algo. Un cuchillo manchado de rojo.
Sigue con el cuerpo hasta que lo deja en la bañera.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Cariño, se me ha caído el
cuchillo. Ahí, sobre la alfombra. Recógelo anda, no me gusta que se golpee, era
de mi abuelo.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
La mujer coge el cuchillo y lo
deja sobre la cama. Va hacia el baño con un bote de cristal en cuyo interior
hay un líquido amarillento. Lo vacía sobre el cuerpo y poco a poco la carne,
los músculos y toda la materia orgánica comienza a desaparecer.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Al final lo vas a hacer mejor que yo nena. Ahora las
sábanas y la alfombra.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
Vuelven al dormitorio. Ella
quita la alfombra manchada de sangre y la mete en una bolsa de basura. Él quita
las sábanas de un tirón. El cuchillo vuelve a caer pero nadie lo ve. Ella le
tiende la bolsa y él introduce ahí las sábanas. Luego se estira para coger las
almohadas y al hacerlo mete de un puntapié el cuchillo bajo la cama. Las
almohadas también van a la bolsa.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Y ahora, ¿Qué hacemos Rick?</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Solo nos queda fregar las
paredes y podremos irnos.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Irnos...Cada uno por su lado. Y
no volverte a ver. No sé si podré.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Podrás. Has de hacerlo. Es eso
o la cárcel. Tú en una para mujeres y yo en otra de máxima seguridad. Y
entonces sí que no nos volveríamos a ver. ¿Quieres eso? </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-No, no quiero...</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
No hablan más. Limpian la sangre
de las paredes, cierran la bolsa de basura y se dirigen a la salida. Antes de
irse Rick echa un vistazo para asegurarse de que todo está en orden. Abren la
puerta y salen.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Ahora irás a un vertedero, lo
más lejos que puedas, y quemarás la bolsa, ¿vale? Yo cogeré el coche y me iré
hacia el norte, tú debes ir al sur.
Cuanto más lejos mejor.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Te quiero Rick. Más que a
nadie. No voy a poder vivir sin ti.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Sé que me quieres, ya me lo has
demostrado. Por eso precisamente debemos separarnos. Pero por un tiempo.
Pasados algunos años podremos encontrarnos y quizá volver a jugar a esto. Pero
ahora es peligroso que sigamos viéndonos ¿entiendes?.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Muy bien. Adiós Rick.- Se pone
de puntillas y le besa.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
-Adiós muñeca.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
Él se pasa la mano por el pelo,
hacia atrás. Se dan la espalda y se van. Cada uno por un camino diferente. Es
de noche. Hace frío. El cuchillo sigue debajo de la cama.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 6pt; text-align: justify;">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="text-align: left;" /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-57097310778164239172015-07-13T08:53:00.001-07:002015-09-01T10:20:56.600-07:00Iconoclasia. (#UnaImagenMilPalabras)<div class="" style="clear: both; text-align: left;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://www.arteselecto.es/app/uploads/2014/10/El-caminante-sobre-un-mar-de-nubes-Caspar-David-Friedrich.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: left;"><img border="0" src="http://www.arteselecto.es/app/uploads/2014/10/El-caminante-sobre-un-mar-de-nubes-Caspar-David-Friedrich.jpg" height="320" width="248" /></a></div>
<div style="text-align: left;">
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<div style="text-align: justify;">
¡Oh hermanas, mirad! Ya viene el Caminante. ¿No sentís sus
pasos en ésta nuestra tierra? ¡Escuchad! En silencio hermanas, pues aunque
queramos hablar no podemos. Está ahí arriba, por encima de todos nosotros; y
avanza, avanza con paso firme. ¡No se detiene! ¿Os dais cuenta? Sigue, sigue,
sigue; está a punto de llegar. Queridas mías es él, sin duda, el Caminante.
Centrad vuestros ojos en la distancia, esquivad los riscos que nos impiden ver,
deslizad vuestra visión por éste agua y decidme cómo son sus ropas. La niebla
es densa lo sé, pero pronto se disipará. Pronto la luz del gran astro iluminará
éste lugar de sombras. Muy pronto queridas mías, muy pronto.</div>
</div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Llevamos siglos aquí abajo, en este reino baldío y desolado.
Flotamos etéreas entre las ruinas de millones de rascacielos y cada día
contemplamos el horizonte llenas de esperanza. Nuestras manos atraviesan todo
lo que tocan, y creednos cuando decimos que estamos malditas. Corazones que no
laten desde hace milenios, venas vacías por las que no circula la sangre,
músculos atrofiados y miembros inútiles. Consumiéndose bajo tierra se hallan
nuestros cuerpos, pero nosotras somos algo más que simple carne. Somos aquello
que solo se consigue con la muerte. Pero estamos atrapadas, permanecemos
ancladas a un sitio al que ya no pertenecemos. Queremos escapar y por eso
esperamos anhelantes al Caminante. Él es el único que nos sacará de aquí.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Aunque no podamos hablar nuestra voz se oye clara y es
profunda. Gritamos en la oscuridad y nos convertimos en un eco transfigurado
que clama por la salvación. ¡Que venga a nosotras tu reino! Pero hágase nuestra
voluntad, satisfáganse nuestros deseos y sean escuchadas nuestras plegarias.
Solo pedimos salir de aquí. Estamos hartas de vagar eternamente, cuando ya el
mundo dejó de creer en nosotras. Nadamos en este mar blanquecino sobre el que
se alza el Caminante. Este océano glauco que tuvo muchos nombres y que todavía
ha de ser nombrado: unos lo llamaron laguna Estigia, otros Niflheim, Mictlán, o
Hitodama.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Fuimos olvidadas y hubo
un tiempo en el que éramos diferentes, pero ahora somos la misma cosa. Antes
teníamos atributos, cada uno el suyo, con los que nos adoraban y nos hacían
ofrendas. Recibíamos sacrificios y eso nos hacía fuertes, pero de pronto todo
desapareció. Se acabaron los rezos, las oraciones e incluso el nombrarnos con
fe. Perdimos el poder y así fuimos desterradas. Enterraron nuestros cuerpos de
bronce, que ahora se pudren, y escribieron nuestros nombres en libros de
ficción. Ya no renaceremos y nunca veremos el Ragnarök acabar con el mundo, ni
la barcaza solar de Ra surcar los cielos. Tampoco asistiremos al rencuentro de
Perséfone con Démeter y la germinación de los campos, ni contemplaremos las
patas de la gran tortuga Ao sosteniendo la bóveda celeste.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Eso es cosa del
pasado, creencias de unos hombres primitivos que murieron hace tiempo. Los que
dominan el mundo en el presente adoran a un dios informe que ni siquiera tiene
nombre. Veneran una trinidad absurda y patética que los domina a todos. ¿Por Él
nos habéis cambiado? ¿Por ese que durante cuarenta días y cuarenta noches os
mandó un diluvio para destruiros? ¿Aquél que es justo y bondadoso y permite la
miseria humana y los pecados capitales? Pobres los mortales, pues al menos
nosotras éramos sinceras y nos mostrábamos completas. Pero el Caminante viene.
Sus huellas se acercan y cuando alcance la cumbre más alta, todo será
descubierto. El humo se disipará y el Dios de ahora morirá como todos los
demás. Las divinidades olvidadas seremos liberadas al fin y las religiones
futuras se aplastarán antes de haber sido creadas. Todo se iluminará y el
hombre caminará solo a través de su propia creación. Cristo será crucificado
por segunda vez y Osiris despedazado de
nuevo. El Caminante desenmascarará a la virgen María y a Buda y él reinará
omnipotente en la tierra como en el cielo.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Porque el Caminante es la Verdad y cuando sea revelada, todo
habrá acabado.</div>
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe allowfullscreen="" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/D6Y2e4CXg8s/0.jpg" frameborder="0" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/D6Y2e4CXg8s?feature=player_embedded" width="320"></iframe></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<i><br /></i></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<i>Y aquí os dejo mi relato para el proyecto Una Imagen Mil Palabras de Reivindicando Blogger. Espero que lo disfrutéis y echéis un vistazo a la</i></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<i><a href="http://reivindicando-blogger.blogspot.com.es/2015/06/unaimagenmilpalabras-vamos-alla.html"> LISTA DE PARTICIPANTES.</a></i></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" /></div>
<br />Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-22371396949004565892015-07-07T04:30:00.000-07:002015-07-13T12:49:38.473-07:00Lesbos en el corazón."κὤττι μοι μάλιστα θέλω γένεσθαι<br />
μαινόλᾳ θύμῳ, τίνα δηὖτε πείθω<br />
μαῖς ἄγην ἐς σὰν φιλότατα τίς τ, ὦ<br />
Ψάπφ᾽, ἀδίκηει;"<br />
<div style="text-align: right;">
"¿Arde de nuevo el corazón inquieto?</div>
<div style="text-align: right;">
¿A quién pretendes enredar en suave</div>
<div style="text-align: right;">
Lazo de amores? ¿Quién tu red evita,</div>
<div style="text-align: right;">
Mísera Safo?"</div>
<div style="text-align: right;">
<br /></div>
<div style="text-align: right;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Yo, un cuerpo azotado por el viento que trata de no marearse demasiado por el movimiento del barco. Bajo mi triste existencia el mar. Mercurio líquido que brilla, casi sólido, y golpea furioso la quilla. Cuánto daría por arrojarme por la borda, hundirme lentamente hacia el vientre primigenio de la tierra y una vez allí, por fin, estar en paz. Pero no, aquí sigo, ondeando como una bandera sobre las ruinas de Ilión. Yo, que serví a las musas y las honré en mi casa; yo, que fui mujer como ninguna otra; yo, que caminé humana entre monstruos, que amé dolorosamente y fui correspondida.</div>
<div style="text-align: left;">
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
No miro hacia proa, no me interesa lo que haya en el
horizonte, soy una figura dorada que da la espalda al mundo y se concentra en
un pedacito de tierra lejano. Casi ni se distingue en la distancia, pero si
frunces el ceño y fuerzas tus ojos hasta que casi sangren, quizá veas el
pequeño puerto o la cúspide del faro. Pero la nave avanza inexorablemente y es
cada vez más difícil, más humillante. Me agarro como puedo a esta imagen, porque
dentro de unos años será lo único que tenga. Allí, en esa pequeña isla, se
queda mi corazón junto al templo de Afrodita. En esa mancha de tierra se quedan
los mejores años de mi vida, cuando todo consistía en vivirnos y en sentir que
nada era más fuerte que nosotras. Se quedan la pureza y la inocencia, la música
y la poesía, se quedan tus manos sobre las mías y tus labios sobre mi cuello.
Yo me llevo el dolor, la agonía; me guardo la tristeza y la añoranza y en las
bodegas, viajan como polizones la ira, la rabia y el odio. Allí fui feliz,
aquí... simplemente no soy.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Cada vez hay más agua entre nosotras y cuanto más me alejo,
más me parece que todo fue un sueño. Pero tú estás ahí, sobre la roca de
Léucade, leyendo mis versos o quemándolos, quién sabe. Estás cerca del Olimpo
querida mía, dile a la trenzadora de engaños que tenía razón, que nuestras
discusiones fueron absurdas, que al final el amor te vacía por dentro. </div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Y seguimos
navegando, rajando el mar como un saco
del que se escapan miles de diamantes. La brillante esfera solar es solo un
semicírculo insertado en el horizonte y sospecho que no llegaremos nunca.
Siento el calor en mi espalda, es agradable, como el abrazo de una madre o el
beso prohibido de un amante. El calor se extiende por todo mi cuerpo, lo inunda
dulcemente y me provoca somnolencia, un sopor tranquilo y relajado. Pronto
estaré dormida, pero de momento tengo que aguantar, he de seguir haciendo
guardia, no soportaría cerrar los ojos y al abrirlos ver que la tierra lejana
ya no está. </div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Mis odas al Amor eran tuyas vida mía. Fuiste siempre aquella
triste sombra que inundaba mis pensamientos, una sombra que contaminaba mi
espíritu y me cegaba. La inspiración de los dioses que fue negada a muchos, a
mí se me entregó con el verbo de tu carne. Apolo maldijo mi nombre y maldecida,
con el peso de los divinos sobre mi espalda, me enamoré de ti. ¡Oh amiga del
alma, qué tristes fueron mis lamentos! Qué
amargas las lágrimas que derramé sobre el cáliz de tu senos, qué injuriosas las
palabras que pronuncié contra el hado. ¡Destruidos sean los templos de la
diosa! ¡Profanados los altares y quemadas las ofrendas! ¡Qué cada día se me
entregue la cabeza sangrante de una paloma blanca y miles de rosas marchitas!
Solo así veré mi sed saciada, pues el agua que bebo es salada y me quema por
dentro.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Los augures nos adivinaron un futuro grandioso: "Como los hombres inmortales de la
Primera Era, vuestro amor será eterno" dijeron. "Como el de Orfeo y Eurídice
vuestro amor será poderoso, pero aun más
puro, pues proviene del único amante lesbiano" estas fueron sus
palabras. Pero ahora nuestro amor quizá sea más parecido al de Medea y Jasón o
tal vez al de Ariadna y Teseo. De la misma manera que estas dos mujeres me
siento traicionada y abandonada, pero yo no mataré a mis hijos que son mis
cantos, sino que los dejaré libres y
serán mi lanza emponzoñada. </div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Recojo mi hilo dorado y me alejo de ti. Me despido para
siempre de la espuma del mar y de mi patria. Dile adiós a mis alumnas, todavía
les quedaba mucho por aprender. Dile adiós a la arena de la playa, y a los
cangrejos que siempre venían a saludarme. Dile adiós a todo aquello de lo que
no me pude despedir yo misma y planta un beso en tu mejilla por mi; así, quién
sabe, algún día germine y tendré un motivo para volver.</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Dormiré ahora, pero
antes quiero ver amanecer, estoy cansada de mirar hacia atrás. </div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" /></div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-65362849484177587992015-04-22T09:41:00.000-07:002015-09-01T10:20:56.611-07:00El rojo te sienta tan bien. (#PGLiteratos)<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEir_zGQklzKitcdt-r2PR3gC7RRelbb3_aV-n59Lo6GKiEHSJank-YwwrDJS2r43ECSrVRAMZ1T7AIC4TjV_cccDaHuJGJ_-owFju7oiONqIJq4wQjo-Fn2k16hcQWVgLfzfHk4OIF7pl8/s1600/mishima.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEir_zGQklzKitcdt-r2PR3gC7RRelbb3_aV-n59Lo6GKiEHSJank-YwwrDJS2r43ECSrVRAMZ1T7AIC4TjV_cccDaHuJGJ_-owFju7oiONqIJq4wQjo-Fn2k16hcQWVgLfzfHk4OIF7pl8/s1600/mishima.jpg" height="200" width="199" /></a>Huye Yukio, escapa. No mires atrás. No dejes de correr. No
lo hagas. O al final el destino te dará caza. ¿Cómo es la senda Yukio, dime,
cómo es? ¿Ves el suelo bajo tus pies? Ya sé que no, tu vista te ha fallado,
pero que no lo hagan tus pies. ¡Qué no lo hagan! La niebla que te envuelve es
densa ¿Verdad? Aceitosa, espesa. Atraviésala, ¡Pártele el alma! Y observa los
trozos que se desprenden de ella. Son recuerdos Yukio, los de una vida tras una
máscara informe que iba pegada a tu propio rostro. ¿La conseguiste arrancar?
Claro que no, claro que no.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Besabas a mujeres y
no lo disfrutabas, amabas otra cosa Yukio, amabas la muerte. Pero la muerte con
torso masculino, aquella de huesos blancos que te miraba desde un rincón.
Convivías con ella mientras te masturbabas pensando en aquel chico, el matón de
tu clase ¿no es así? E imaginabas sus sangre oscura surcar tu vientre y su pene
erecto introducirse en ti como una salamandra acusadora. Y llegabas al orgasmo
más íntimo y más universal al mismo tiempo, aquel orgasmo de espíritu que
expulsaba de tu cuerpo el semen caliente, sin vida, de un hombre torturado.
Torturado por el pasado marchito. Ese pasado que deseabas, que anhelabas como
si alguna vez hubiera sido tuyo.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Era tu abuela la que
te contaba todas esas historias de poderosos emperadores y peligrosos guerreros
¿No es así? ¿Son esas historias las que te han llevado a desenvainar la espada
Yukio? Alzas el filo para que el mundo lo contemple, pero el mundo está ciego y
tú no puedes devolverle los ojos. No llores más, no te refugies en la
oscuridad. Es la hora Yukio, mátalos a todos.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
.............................................................................................................</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i>Yukio Mishima (cuyo verdadero nombre era <span style="background-color: white; color: #252525; font-family: sans-serif; font-size: 14px; line-height: 22.3999996185303px;">Kimitake Hiraoka), nacido en Tokio el 14 de enero de 1925, fue un escritor atormentado, carcomido por el dolor que le producía una sociedad que no entendía y que veía abocada al fracaso. Sus obras son de una intensidad trágica, intimistas y cargadas de un sentimentalismo doloroso y a la vez profundamente humano. </span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: #252525; font-family: sans-serif;"><span style="background-color: white;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.3999996185303px;"><i>Murió el 25 de noviembre de 1970 realizándose el ancestral rito del seppuku demostrando así que no podía seguir viviendo tras la máscara que el mismo se había impuesto. Ahora solo nos quedan sus libros: la muerte y la vida hablando a través de sus textos. </i></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: #252525; font-family: sans-serif;"><span style="background-color: white;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.3999996185303px;"><i><br /></i></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #252525; font-family: sans-serif;"><span style="background-color: white;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.3999996185303px;"><i><a href="http://reivindicando-blogger.blogspot.com.es/2015/03/preparados-para-pequenos-grandes.html">HOMENAJES A OTROS AUTORES.</a></i></span></span></span><br />
<span style="color: #252525; font-family: sans-serif;"><span style="background-color: white;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.3999996185303px;"><br /></span></span></span>
<div style="text-align: left;">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" /></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: #252525; font-family: sans-serif;"><span style="background-color: white;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.3999996185303px;"><i><br /></i></span></span></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-84925072547656823862013-10-21T10:03:00.001-07:002013-10-21T10:04:51.668-07:00La virtud de las palabras.<div class="MsoNormal">
Tengo los ojos abiertos y aun así parece que todavía
mantengo mis párpados cerrados. Lo único que me rodea es oscuridad, una negrura
densa que repta por todas partes inundándolo todo. De vez en cuando me
llega algún pitido lejano, intermitente, descarriado, indicándome que todavía, y
muy a mi pesar, estoy anclado a la vida de allá arriba. Aquí se está bien pese a
la falta de luz, no hay dolor, ni sufrimiento, ni tristeza, ni alegría, ni
nada. Reina el silencio, el silencio del sepulcro al que me encamino, el
silencio de la muerte que avanza inexorablemente hacia mí. Mi mente se ha
parado y los pensamientos ya no fluyen con claridad, los recuerdos se
desvanecen lentamente mientras en algún lugar, muy lejano ya, mi cuerpo descansa
sobre una cama de hospital atendido continuamente por médicos que no encuentran
una solución a mi estado y que observan como, poco a poco, me voy
desvaneciendo. Antes, cuando todo este proceso de decrepitud comenzó, me
aferraba fuertemente a la vida, luchando cada día por despertar y viendo mis
intentos frustrados una y otra vez, escuchando, con más claridad que ahora,
todos esos ruidos mecánicos que no hacían sino darme fuerzas para seguir
intentándolo. Pero llegó un momento en que eso no era suficiente, me cansé, sí,
simplemente me cansé de pelear. Aceptar mi destino y resignarme me pareció la
opción más acertada y poco a poco fui notando como me alejaba de la existencia
terrenal para hundirme cada vez más en la oscuridad. Ahora simplemente espero
cruzado de brazos, metafísicamente hablando por supuesto, flotando en esta
espesura, aguardando la llegada de aquel mítico esqueleto con guadaña que me
cruce al otro lado de la laguna Estigia. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Y aquí me encuentro, sin nada que hacer, sin nada que ver,
sin nada que sentir. Los pitidos se van apagando, cada vez suenan menos. Las
voces de los médicos se ahogan lacónicamente y yo mismo voy perdiendo
consistencia. Me siento arrastrado por una fuerza invisible hacia algún lugar,
succionado sin remedio como un vulgar trapo sucio ¿Será esto lo que llevo
esperando tanto tiempo? ¿Ha llegado mi hora por fin? Las tinieblas que me
rodean van cogiendo forma y me sorprendo al comprobar que reconozco esas
figuras aunque hace mucho tiempo que no las veo: un árbol, un banco desconchado
y sin pintar, hojas secas en un suelo de tierra… Y de pronto lo oigo: <i>“Sé fuerte”</i>. La voz suena clara, limpia,
sin interferencias. Suena milagrosa para mis oídos. <i>“Recuerda el día en que nos
conocimos”</i>. Me resulta familiar el tono,
la cadencia hasta las pausas. <i>“No puedes
dejar que esto te supere”.</i> ‘¡Anne! ¡Oh Dios mío es Anne! ¡Es ella sin duda!
Y rápidamente, como movido por un remolino de aguas turbulentas, aparezco
sentado en ese banco de aspecto desvencijado observando el sinuoso camino que
se adentra en los árboles. Y precisamente por ese camino aparece, como tantos
años atrás, una silueta de mujer que camina tranquilamente justo hacia donde yo
estoy. <i>“Te quiero”.</i> Y las palabras, que resuenan por todo el onírico paisaje,
me levantan de mi asiento. <i>“No puedo
perderte”.</i> Doy un paso hacia aquella chica de veinte años. <i>“Por favor, sé fuerte”.</i> Miro su rostro,
la reconozco, reconozco el momento. Ahora ella me hablará, me preguntará que si
vengo habitualmente a pasear aquí. <i>“Crhistian,
por favor”.</i> De pronto comienza a llover, esto no lo recuerdo. Las gotas de
lluvia caen sobre mi cuerpo como lágrimas…como lágrimas…</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
Y ella desaparece, el recuerdo cambia y un muro se
materializa justo enfrente de mí. Es de ladrillo visto y en él hay una ventana
de madera cerrada a cal y canto. Me quedo parado, sin saber qué hacer, la
lluvia mojándome el pelo, recorriendo mi rostro…inmediatamente tomo conciencia de
que tengo que avanzar. Doy un paso y el figurado Sol parece perder intensidad.
Otro paso más y los colores se van perdiendo. Agarro el tirador de una de las
batientes y todo se vuelve negro otra vez. Tiro de él y cuando la ventana se
abre una intensa luz lo inunda todo. Un fogonazo de energía me impacta y siento
un dolor intenso que mengua rápidamente. Oigo pasos nerviosos, voces dormidas
que despiertan en mi cabeza. Los pitidos chillan en mi oído y cuando abro los
ojos me encuentro ante caras
sorprendidas que me miran fijamente. Y a mi lado, llorando junto a mi hombro,
la mujer cuyas palabras me han despertado.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-13187845947866393242013-09-04T04:42:00.001-07:002013-09-04T04:49:16.288-07:00Entre la Parca y la pared- Taller de escritura- Be Literature #1<div class="MsoNormal">
<u>Inspiraciones:</u></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipWwLtIZrvv27VPmHEbgV8blAlJrtDD4bfYlU906B2KgHQW-D2PvwhYmMOooTchuh45eZGlxhZpLSX8xocw-4EHYCkNPN1AnIKV7EAmxdCvhiBiCkZVx2mi3GSTFmYe_sOTJ-oBhRBQQs/s1600/BeFunky_1151037_10151786698018815_182267131_n.jpg.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipWwLtIZrvv27VPmHEbgV8blAlJrtDD4bfYlU906B2KgHQW-D2PvwhYmMOooTchuh45eZGlxhZpLSX8xocw-4EHYCkNPN1AnIKV7EAmxdCvhiBiCkZVx2mi3GSTFmYe_sOTJ-oBhRBQQs/s1600/BeFunky_1151037_10151786698018815_182267131_n.jpg.jpg" /></a><iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.youtube.com/embed/RAtacHPAHLI?feature=player_embedded' frameborder='0'></iframe></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b><u>Entre la Parca y la pared</u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b><u><br /></u></b></div>
<div class="MsoNormal">
Siempre entre la vida y la muerte, siempre entre el cielo y
el infierno, siempre mostrando el camino. Soy la que acabo con las luchas por
la supervivencia, la que se lleva tanto a los que han perdido la batalla como a
los que querían ganarla, porque la victoria no les pertenece a ellos. Soy el
árbitro que decide cuándo ha terminado el partido y cuándo hay prórroga. Soy la
única que imparte verdadera justicia. Y aún así, estoy en la más absoluta
oscuridad. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Un nuevo nombre apareció en la lista. Sé que en el momento en que me
acerqué a ti me viste, supiste que estaba ahí. A tus familiares les recorrió un
escalofrío, un mal augurio. Observé como apretaron más fuerte tu mano, como
contemplaron tu rostro, como acariciaron tus cabellos brillantes y yo les
prometí que te mostraría el camino, no es ningún consuelo, lo sé, pero es lo
único que puedo ofrecer. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Solo fue un momento, pero cuando me tendiste la mano de
forma resignada, un pitido constante sonó en la habitación. Y yo no me quedé
allí, ya había contemplado esa situación miles de veces, solo tus ojos miraron
atrás, como muchos habían hecho antes. Supongo que lo siento, como
tantas otras veces que he hecho esto, pero es mi deber. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Las puertas del cielo se abrieron ante tu llegada, tenías
suerte, el Paraíso te esperaba. Te animé a caminar hacia delante, asintiendo
con la cabeza, y con una sonrisa en mis descarnados labios, lo que quizás
compondría una mueca macabra, pero por suerte, la capucha no te permitía ver
nada de mí. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Un brillante ángel se presentó, su mano tendida gentilmente
hacia ti. Aceptaste gustosa la invitación. Antes de que las puertas se cerraran,
el alado me dirigió una mirada de advertencia, como todas las otras veces, me recordaba
que no podía dar un paso más, que no tenía permitido entrar. No hasta que todo
mi trabajo estuviera hecho. </div>
<div class="MsoNormal">
Me di la vuelta, alejando mi vista de la promesa que no
sabía si algún día sería capaz de alcanzar, y extendí la mano por entre la
capa negra para materializar un viejo pergamino, dos nombres más se habían inscrito
en él.</div>
<br />
<div class="MsoNormal">
Me marché de allí, mientras volvía a esconder las
esqueléticas manos dentro de la túnica. Tenía trabajo que hacer.</div>
Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-72683149604338314752013-08-26T15:55:00.002-07:002013-08-27T15:07:25.420-07:00Cuando llegue el momento.<div class="MsoNormal">
Habrá un momento en el que me abrazaré a la foto en la que
aparecen mis mejores amigos, un momento en el que solo mirando la imagen
recuerde cada segundo, cada risa, cada palabra dicha en voz alta, incluso los
pensamientos que brillaban en sus ojos. Habrá un momento en el que pasaré la
yema de mi dedo por el frío cristal, y aún así, sentiré el calor en mi
interior. Habrá un momento en el que con cuidado abriré la carcasa del marco,
dejando que mis dedos se encuentren directamente con nuestros rostros sonrientes.
Y sé, que en ese momento, voces se colarán en mi cabeza:</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Eh! ¿Quién te crees que eres? Deja de acaparar la cámara</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Enana! Para de comer, estamos haciendo la foto</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Esperadme!</div>
<div class="MsoNormal">
— Esta noche podremos ver las estrellas</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Bah! Si quisiera ver las estrellas me miraría en el
espejo</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Sonreír! El temporizador ya está puesto</div>
<div class="MsoNormal">
— ¿Y qué gracia tiene acampar si no te gusta el campo?</div>
<div class="MsoNormal">
— Vosotros me habéis traído a este nido de bichos</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Decid patata!</div>
<div class="MsoNormal">
— Nunca he entendido porqué patata, siempre terminas con cara
de idiota</div>
<div class="MsoNormal">
— Podemos decir <i>cheese</i></div>
<div class="MsoNormal">
— Y a ti te pareció buena idea</div>
<div class="MsoNormal">
— Porque todos dijisteis que sí. Asco de presión de grupo</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡No! De <i>cheese</i> nada, aquí patata</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Oh! ¡Venga! No puedes salir comiéndote un bollo. Esta
foto pasará a la posteridad.</div>
<div class="MsoNormal">
— Mucho mejor, así nunca se me olvidará de qué marca y tipo
son mis favoritos.</div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Parad y sonreír o mañana os levantaré con cazos de agua!</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Un grito, una petición, un comentario, una respuesta
sarcástica, otra irónica, una risa… Una foto juntos, un pasado en común. Un
futuro condicionado por la persona que eres, y que tus amigos te ayudaron a
formar. Un “¡Eh! ¿Qué tal estás?” cuando vayamos por la carretera, y un “No me
puedo creer que ya hayamos llegado” cuando se acerque el final del viaje. Una
despedida de amigos que uno a uno se van marchado. Una sonrisa que permanece
imperecedera en cada mente. </div>
<div class="MsoNormal">
La lágrima que de felicidad resbala por mi mejilla, el
pitido repetitivo de la máquina que mantiene una vida, la mente cargada de
recuerdos como si hubiera vivido más de una vez, la paz, resignación y
aceptación, presentes en cada rincón de la habitación.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Y entonces una risa, una palabra amable, unos rostros
jóvenes. Y una promesa, la última promesa, es en aquel momento cumplida “Cuando te
canses de vivir vendremos a recogerte”</div>
<br />
<div class="MsoNormal">
En mis labios se formó una sonrisa, la sonrisa de haber sido
tocado por ángeles.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" /></div>
Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-20520204602516564482013-08-21T15:46:00.003-07:002013-09-12T09:25:05.305-07:00Música para las bestias.<h3 style="text-align: center;">
<i><span style="font-size: large;">"Όταν θέλουμε κάτι που δεν σταματούν να καταστρέψει."</span></i></h3>
<h3 style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-weight: normal;"><i>(Cuando queremos algo no paramos hasta destruirlo.)</i></span></span></h3>
<div>
<span style="font-size: large;"><span style="font-weight: normal;"><i><br /></i></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Sola.
Sola en este triste lugar, donde la luz del Sol no llega, donde mis únicos
compañeros son monstruos y bestias y donde mi marido me tiene confinada. Así
pasarán mis días, junto a un hombre que me ama por capricho, pero al que he
llegado a coger cierto cariño. Es verdad que Hades se preocupa por agasajarme
como a la reina que ve en mí, pero no se da cuenta de que mi lugar no está en
el inframundo, que yo pertenezco a la tierra y a la vida, como mi madre, y que
aquí solo hay muerte y almas perdidas. Pero aun así me resigno, porque ¿qué
otra cosa puedo hacer? Ahora reino en el infierno, junto a él y eso es algo por
lo que tengo que estar agradecida, ¿no?<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Hades
puede parecer un dios frío, un ser oscuro y terrible cuyos dominios son tan
hostiles como él mismo. Pero si algo he podido observar en los largos años que
llevo junto a él es que hasta el dios de los muertos está vivo, siente tanto, o
incluso más, que el propio Apolo. Aunque no lo parezca su corazón late. He
tardado mucho en darme cuenta de esto, quizá porque al principio solo sentía
odio hacía él por haberme separado de mi madre, del mundo exterior y de todo lo
que quería. Fue entonces cuando amé a otros hombres, cuando los deseaba por
pura lascivia y sed de venganza, cuando luché por Adonis y humillé a Afrodita y
sobre todo cuando conocí a Orfeo.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
¡Oh
Orfeo! Aun hoy, en el frío lecho junto a mi esposo, me acuerdo de ti. Recuerdo
tu tez blanquecina como de mármol, tus fuertes brazos, tu torso ancho y
fornido, tus ojos azules como el mar de Posidón…pero sobre todo, lo que todavía
me hace suspirar, es el recuerdo de esa música que me cautivó y que me hizo
amarte. Las notas profundas que sacabas de esa lira que era como una extensión
de tu propio cuerpo, inundando los salones de este palacio siempre vacío,
siempre frío.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Recuerdo
que cuando te presentaste ante nosotros nos dejaste sorprendidos porque habías
conseguido dormir a nuestro can Cerbero, algo que nadie había logrado antes. En
cuanto te vi, en medio de la sala del trono tan pequeño e indefenso mirando,
nervioso, hacía donde nos sentábamos Hades y yo, me vino el olor de la tierra y
el rumor del agua. ¡Venías del exterior! De aquél lugar que había dejado atrás
y que añoraba profundamente. No pude hacer otra cosa que fijarme de una manera
especial en ti, dando paso a los primeros síntomas del amor.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Era obvio
que algo querías, por algún motivo habías cruzado junto a Caronte la laguna
Estigia y te habías presentado ante nosotros corriendo tantos peligros. Yo
creía que mi esposo iba a echarte de allí ofendido por la presencia de un
mortal en su reino, pero Hades, tan sorprendido como yo, te instó a hablar;
algo que ahora hubiera preferido que nunca ocurriera. Entonces nos contaste tu
historia. Venías a buscar a tu amada Eurídice que había muerto por la picadura
de una serpiente. Nos rogaste que te la devolviéramos, que no sabías vivir sin
ella. Tu rostro, compungido y sincero, nos ablandó el corazón, aún así no
cedimos. Hades no pensaba incumplir sus propias normas y devolver un alma a la
vida y yo… yo odiaba a Eurídice. Si, en cuanto la nombraste y le diste la
categoría de tu amada unos celos infundados y absurdos me invadieron. ¿Qué
tenía Eurídice que no tuviera yo? ¡Yo, Perséfone, hija de Démeter! Yo debía ser
tu amada, no ella. Y por un momento me alegré de que hubiera muerto.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Pensamientos
crueles, ahora me doy cuenta. Pero ¿qué esperabas? Estaba recluida en el
infierno, secuestrada por el hombre que me amaba y al que yo, en ese momento,
odiaba. Verte fue un soplo de aire fresco que inundó mis pulmones llenos de
ceniza. Además eras la venganza perfecta, tú que rechazabas a todas las ninfas
que se enamoraban de ti. Imagínate que cara hubiera puesto Hades si le
hubiésemos confesado nuestro amor furtivo. Habría pagado por verla… ¡Pero tenía
que entrometerse esa a la que decías que amabas! Todas mis cábalas destruidas
en cuanto pronunciaste su nombre.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Por eso
nos mostramos tan duros contigo, por eso te ordenamos que salieses cuanto antes
de allí si no querías quedarte para siempre. Te llamamos cobarde por ir a
buscar a tu esposa estando vivo y no haberte atrevido a morir por ella, como
hizo Alcestis que cambió el destino de su amado Admeto muriendo en su lugar.
Pero tú aguantaste todos estos envites e hiciste algo sorprendente, algo que
nos dejó callados sin opción a réplica. Te sentaste en el vasto suelo de mármol
negro y comenzaste a tocar tu lira. Era evidente que no pensabas moverte de
allí hasta que accediéramos a devolverte a Eurídice y mientras, la dulce
música lo envolvía todo. De pronto la luz solar pareció penetrar en el palacio,
cosa imposible ya que estábamos a muchos metros bajo tierra. Un viento suave y
fresco, cargado con el perfume de las flores que mi madre hacía florecer en
primavera, se coló por todos los resquicios. La melodía era embriagadora, nos
llenaba por dentro limpiando nuestras almas inmortales y entonces entendimos
porqué Jasón te necesitó en su expedición para acallar el canto de las sirenas.
Entendimos porqué las ninfas te adoraban y porqué Apolo te envidiaba. Todo
brillaba y refulgía y entonces, cuando ya no podíamos contener las lágrimas,
dejaste de tocar. La magia se rompió y la oscuridad retornó a su lugar.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Hades se
levantó y se acercó a ti, a su lado parecías un joven cervatillo muerto de
miedo, y te dijo que podías recuperar a tu amada. Tus rasgos compusieron
una mueca de increíble felicidad y fue en ese momento cuando mi ira estaba en
su punto más álgido. No podía permitir, después de lo que había escuchado,
dejar que Eurídice volviera contigo como si tal cosa, aunque no pudiera revocar
la decisión de mi esposo. Recuerdo, con mucho pesar, que alcé la voz y te
maldije poniéndote una condición cruel e inhumana para volver con tu amada. Te
dije que ella volvería contigo, pero que en el trayecto de regreso al mundo de
los mortales iríais uno detrás del otro y tú siempre delante. Si en algún
momento volvías la cabeza para mirarla, aunque solo fuera un segundo, Eurídice desaparecería
y no la volverías a ver.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Nunca me
he arrepentido tanto de mi crueldad, todavía hoy no comprendo por qué lo hice
si te amaba.<o:p></o:p></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Te vimos
partir, delante, siempre delante, sin girarte ni una vez. Eurídice iba detrás,
pero tu curiosidad, o tú preocupación por saber si ella realmente estaba ahí y
se encontraba bien, hicieron que te dieras la vuelta cuando ya casi lo habíais
logrado. Como predije tu amada desapareció y retornó al mundo de los muertos y
tú te quedaste destrozado, tanto esfuerzo para nada. Tanto sudor derramado en
vano, tantas lágrimas… Y entonces, esta vez sí, decidiste volver con nosotros
como lo hacen todas las almas, muriendo.<br />
<br /></div>
<br />
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
Lo siento
Orfeo, no sé si algún día podrás perdonarme, pero es necesario que sepas que
ahora, cuando me asomo a la ventana y os veo a Eurídice y a ti flotando en el
Elíseo, solo pienso en que por fin seréis felices eternamente.<o:p></o:p></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<br />
<a href="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Licencia de Creative Commons" border="0" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-78005329218818670352013-08-15T23:57:00.000-07:002013-08-17T17:18:35.922-07:00La bala y la conciencia.<div class="MsoNormal">
El disparo sonó certero. La bala recorrió la pequeña
distancia que separaba a los dos hombres y penetró en el cuerpo de uno de
ellos, perforando la carne, abriéndose paso desgarrando músculos y tendones
hasta que salió por el lado contrario, no sin antes romper algunas vértebras.
En ese momento el mundo quedó en silencio. El cuerpo inerte cayó sobre el suelo
de tierra y la sangre comenzó a mancharlo todo de rojo, formando un gran charco
bajo el cadáver. </div>
<div class="MsoNormal">
La silueta que sujetaba el arma con una mano miraba impasible
la mortal escena. Sus ojos del color del acero mostraban un brillo especial,
como de alegría ante una victoria. Se apartó rápido del cuerpo antes de que la
sangre, que avanzaba rápido, le manchase sus zapatos nuevos. Se dio la vuelta y
se alejó silbando siniestramente una vieja canción de Cat Stevens. </div>
<div class="MsoNormal">
<br></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "Baskerville Old Face"; mso-bidi-font-family: "Arial Unicode MS"; mso-fareast-font-family: "Arial Unicode MS";"><span style="color: #e69138;">DOS HORAS ANTES…</span><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br></div>
<div class="MsoNormal">
El aire nocturno era frío y húmedo, las farolas arrojaban
una quirúrgica luz blanquecina que se difuminaba entre la espesa niebla de
Londres. El Asesino respiraba relajadamente mientras su cabeza maquinaba.
Vestía unos pantalones tan ajustados que casi intentaban fusionarse con su piel
y una camisa de seda blanca, todo esto debajo de una gabardina marrón anudada
con un cinturón de hebilla prominente. Sobre la cabeza un sombrero de ala ancha
ocultaba un pelo tan negro como el ala de un cuervo. El Asesino andaba de
manera tan imperceptible y sutil que parecía que la gran avenida, desierta a
esas horas de la noche, avanzaba hacia él ahorrándole el esfuerzo de mover las
piernas. Tenía mucho que agradecer a esa forma de caminar, pues gracias a sus
pasos muchas personas no habían sentido la presencia de la muerte hasta que la
tenían encima. El recuerdo de algunos de sus asesinatos le hizo sonreír pues
cada uno era mejor que el anterior. Se superaba día a día, ideando nuevas
formas de matar, jugando con las vidas humanas como si de un dios se tratase.
Realmente así se sentía, como un auténtico dios capaz de decidir quién vivía y
quién moría. Recordaba especialmente, y con cierto cariño morboso, uno de sus
trabajos más limpios. El objetivo era acabar con una joven universitaria de
veinte años que había contraído una importante deuda con la gente que le
facilitaba la marihuana que tanto le gustaba fumar. Si todo salía bien sería su
víctima más joven, un nuevo logro en su carrera. Fue a su casa a medianoche,
cuando todo el vecindario dormía. Entró por una ventana del primer piso que
estaba abierta y se encontró en un salón enorme lujosamente decorado. Una
música inundaba el ambiente, ahora no era capaz de acordarse de quién cantaba,
aunque estaba seguro que era un hombre. La joven estaba de espaldas a él,
sentada frente a una mesa, cenando sola. Que fácil había sido, desenfundó su
pistola y disparó. La cabeza de la chica cayó cómicamente sobre el plato de
comida, pero lo más gracioso fue descubrir que había alguien más en la casa,
seguramente su padre o un hermano, algún varón por los pasos agigantados que
dio cuando oyó el tiro. ¡Pero no pudo hacer nada! Cuando llegó al salón él ya
se había ido y el trabajo estaba hecho. La adrenalina del recuerdo le inundó
por dentro y le hizo darse cuenta de lo bueno que era.</div>
<div class="MsoNormal">
<br></div>
<div class="MsoNormal">
¡Pero hoy no podía ocupar su mente con evocaciones absurdas
del pasado! Tenía que estar despejado pues estaba a punto de cometer el crimen
de su vida. Por la mañana, cuando el reloj marcaba las doce, había recibido una
llamada de alguien que quería encargarle un trabajo. Un hecho común y cotidiano
para él hasta que la persona que estaba al otro lado de la línea le había dicho
a quién debía aniquilar. Le pagarían una enorme suma de dinero si acababa con
Charles Easton, dueño de una importante multinacional inglesa con fuerte
influencia en el parlamento. Al parecer el querido Charles, muy apreciado por
la prensa y las autoridades por su conocida labor humanitaria, había engañado y
estafado a sus propios trabajadores que ahora pedían venganza ya que en los
tribunales no la habían obtenido, quizá por tratarse el demandado de quien se
trataba. Realmente esto le resultaba del todo indiferente, lo que más ansiaba
era quitarle la vida a un pez gordo, pues esos mueren de una manera distinta a
la de las demás personas. </div>
<div class="MsoNormal">
El asesinato tendría lugar a las cuatro y media de la
madrugada exactamente, en el Hyde Park and Kensington Gardens dónde se esperaba
que el magnate acudiría, como tantos otros días, sin escolta alguna. El pago
por el trabajo realizado se efectuaría después como era costumbre.</div>
<div class="MsoNormal">
<br></div>
<div class="MsoNormal">
La niebla seguía anclada a la tierra cuando el Asesino
divisó la entrada del parque, trepó por la valla cerrada y cayó al otro lado.
Al levantarse se sacudió el polvo de la gabardina, se limpió los zapatos y se
encaminó hacía Speaker’s Corner donde ya debería estar el tal Charles.</div>
<div class="MsoNormal">
Cuando llegó por un camino cubierto de maleza le sorprendió
no ver a nadie y más le sorprendió la voz que escuchó justo detrás de él.</div>
<div class="MsoNormal">
-Hola. No existe ningún grupo de ex-trabajadores del señor
Charles Easton. Tampoco es cierto que necesitara de tus servicios. Yo te llamé
y me lo inventé todo. Tenerte aquí delante, de nuevo, es algo perturbador no te
voy a engañar.-La figura hablaba enérgicamente, y al Asesino le costó
comprender que estaba pasando hasta que su vista se desvió hacia la mano del
sujeto que amarraba firmemente una pistola.- Tú mataste a mi hija conmigo
delante. Rose, mi pequeña Rose. No tuviste ni la decencia de dejar que el disco
del gramófono acabase de escupir las últimas notas de esa canción de Cat
Stevens que ella siempre escuchaba. Pero en fin, no pasa nada, he venido a
vengarla, así que hasta luego.</div>
<br>
<div class="MsoNormal">
Todo sucedió muy rápido, sin que el Asesino tuviera opción a
reaccionar. El disparo sonó certero y todo se volvió oscuro para el hombre que
tantas vidas había quitado…<br>
<br>
<a href="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Licencia de Creative Commons" border="0" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;"></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-25876321023944039832013-08-13T12:43:00.001-07:002013-08-14T03:30:11.853-07:00She.<div class="MsoNormal">
Abrir los ojos y descubrir que algo ha cambiado. Despertarte
una mañana y darte cuenta de que tu vida ya no va a ser la misma. Acercarte al
espejo como cada día y observar que si, te han salido tetas. Efectivamente,
unas nuevas protuberancias se instalan en tu pecho y te preguntas que talla de
sujetador usarás. Pero eso no es lo único que ha cambiado, notas que falta
algo, te sientes vacío y echas de menos alguna cosa, aunque no sabes qué
exactamente. Y de pronto la evidencia salta ante ti y te hace caer de espaldas
contra la cama, deslizas tu mano hasta la entrepierna y…efectivamente, ahí no
hay nada. Lo que antes colgaba y te hacía presumir ante tus amigos ahora se ha retraído
misteriosamente y te hace sentir extraño, porque lo de los pechos está bien,
pero esto ya…</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
¿Y ahora qué? Te
preguntas. Te levantas a duras penas de la cama y vuelves al espejo. La verdad
es que estás cañón: el pelo negro canoso que empezaba a escasear se ha
transformado en una melena roja que se desborda en bucles mareantes por tus nuevos
hombros más delgados y definidos. Los rasgos faciales se han redondeado, los
pómulos se han hinchado y han adquirido un característico rubor e incluso te ha
salido un pequeño lunar encima de los labios, que ahora son más carnosos. Los
ojos siguen siendo marrones, algo al menos queda de tu masculino pasado. </div>
<div class="MsoNormal">
Te pones a pensar en lo que vas a hacer a continuación y
asombrosamente tu mente empieza a llevarte de un tema a otro relacionándolos
todos de la manera más incomprensible e inconexa. Se muestra ante ti la lista
de la compra que hiciste el día anterior y te das cuenta de que está
incompleta, el armario donde guardas tus inútiles camisas aparece también y decides
que hay que reorganizarlo entero, incluso te da tiempo a pensar en que deberías
reformar el baño. Obligas a tu mente a detenerse y te das cuenta de que no solo
has cambiado físicamente, tu forma de pensar también ha sufrido una
metamorfosis. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Sin saber todavía que hacer te quitas el pijama de horribles
cuadros azules que le sienta espantosamente mal a tu nuevo cuerpo y te vistes
con unos vaqueros que se te van cayendo a cada paso y con una camisa rosa, por
ir entrando en las costumbres femeninas. Sales a la calle y te sorprende que,
aunque todo sigue igual, tú lo ves de forma distinta. El día anterior no te
hubieras fijado en absoluto en esa caca de perro que está enfrente de ti, pero
hoy te parece la cosa más repugnante que has visto nunca y te alejas tapándote
la nariz casi a punto de vomitar. Descubres a lo lejos a la señora Douvoir, la
vecina de arriba que nunca te caía bien por motivos que desconocías, hasta hoy
que se presentan todos de golpe y descubres que es una hipócrita, una mujer
amargada que lo único que sabe hacer es cotillear sobre la vida de la gente y
que encima usa un tinte de pelo que no
le favorece en absoluto, será perra… Pasa a tú lado y la saludas, ella te mira
extrañada y sigue su camino sin detenerse siquiera. </div>
<div class="MsoNormal">
Sigues sin saber que hacer, así que continuas andando
torpemente con tus deportivas de la talla cuarenta y tres que lo único que
consiguen es hacerte tropezar. Entonces lo ves claro, necesitas comprar algo y
rápido. Te encaminas hacía la zapatería de la esquina y cuando entras vas, casi
sin darte cuenta, a la sección de calzado de señora donde te encuentras más
a gusto que en el propio Valhalla. Los nombres de los diseñadores entran en ti y
los reconoces absolutamente a todos: Jean Paul Gaultier, Manolo Blahnik, Yves
Saint Laurent… a partir de ahora se convierten en tus mejores amigos. </div>
<div class="MsoNormal">
Eliges unos tacones rojos y los pones en la caja para pagar,
sacas la tarjeta de crédito y se la das al dependiente, luego le muestras el
DNI y esperas. El empleado te mira, después baja la vista de nuevo al DNI, otra
vez te mira, otra vez al DNI, a ti, al DNI… y caes en la cuenta de que quizá no
salgas lo suficientemente favorecedora en la foto de carné o tal vez el bigote
que lucías antes es lo que desconcierta tanto al dependiente. Guardas el DNI
casi indignada y fijas la mirada en los ojos del hombre, una mirada que podría
matar por si sola. Al empleado no le pasa desapercibida la amenaza e introduce
la tarjeta en el datáfono, tecleas el número secreto y te marchas casi sin oír
el “vuelva pronto” que el aturdido vendedor dice a tu espalda. A pesar de todo
estás feliz por tu nueva adquisición.</div>
<br />
<div class="MsoNormal">
Vuelves a casa y te entran unas ganas imparables de comer
chocolate. Vas a la nevera y no hay, empiezas a sudar, necesitas cacao, tu
paladar te lo está pidiendo a gritos. Bajas de nuevo y entras en el
supermercado casi histérica, buscas en las estanterías y no lo encuentras,
preguntas al dependiente y cuándo te dice que se les ha agotado sientes un
deseo irrefrenable de estamparle contra la pared por su ultraje, aún así no lo
haces y le sonríes. Te marchas con las lágrimas a punto de desbordarse, subes
las escaleras cochambrosas de tu piso pensando en lo cruel que es la vida y
entras en casa sin ganas de vivir. Te echas sobre la cama, no sin antes sacudir
las sábanas, y lloras. Y así es como a la mañana siguiente te despiertas con el
mismo cuerpo pero con una diferencia, sientes un dolor en el estómago casi
inhumano. Apelas a todos los santos que conoces pero el dolor no remite. Te
levantas de la cama aturdida, sintiendo que explotas por dentro. Te acuerdas
del empleado del supermercado del día anterior, de su hermana, de su madre y de
toda su familia también y le odias, le odias porque realmente necesitabas ese
chocolate. Sientes náuseas y ganas de matar a alguien, menos mal que siempre
has vivido solo. Vas al cuarto de baño sintiendo que algo se ha roto en tu
interior, lo notas bajando por la entrepierna. Los recién estrenados ovarios te
duelen de una manera difícil de soportar y es entonces cuando ves la sangre. ¿Así qué esto es lo que llaman “el periodo”? ¿Esto lo que vas a tener que soportar
cada veintiocho días? Que cruel y horrible es la vida. Pero mira el lado bueno,
por lo menos no estás embarazada. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><span style="font-size: large;"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></span></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-42525358908681721552013-07-21T08:49:00.000-07:002013-08-13T12:52:29.741-07:00Un diario en las trincheras. [II]<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
No le caía bien, nada bien, tenía que reconocerlo, el
perfecto Misha, siempre hablando de su perfecta familia, con su perfecta risa,
su perfecto optimismo y a Mark solo le parecía un perfecto idiota. Si, hay que
reconocer que le tenía envidia, a él no le esperaba nadie en casa, a Misha sí,
una familia y una guapa mujer, cuya foto guardaba en un medallón del cual no
se desprendía nunca y aprovechaba cualquier situación para mostrárselo a los
demás ¡Lo que daría por cambiar sus vidas! A él no le quedaba nada, nada…</div>
<div class="MsoNormal">
Se levantó del suelo sin molestarse en sacudirse las ropas y
siguió el camino por el que Misha se había marchado minutos antes.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Cuando llegó a la zona del comedor se dio cuenta de que lo
que le había dicho el soldado era verdad; unos brindaban por volver a casa,
otros, entre risas, por todo lo contrario, no volver y así no tener que ver a
su suegra de nuevo, también había grupos apostando acerca de cuantos iban a
matar en el siguiente asalto, por supuesto no faltaban aquellos que observaban
la situación con mirada reprobatoria. De entre todos estos hombres, vestidos casi
igual, resaltaba uno, que además, en ese mismo momento, se encaminaba hacia
Mark, con una enorme e irritante sonrisa en su rostro, ya rojo por el calor del
alcohol.</div>
<div class="MsoNormal">
<br />
<a name='more'></a><br /></div>
<div class="MsoNormal">
— Me alegra que vinieras, sí, me alegra— dijo efusivamente—
sabía que vendrías, solo te haces de rogar.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Mark frunció el ceño, molesto, porque le pareció notar en la
voz de Misha un cierto tono a superioridad, pero una palmada en la espalda le
sacó de su ensimismamiento e hizo que volviera a escuchar lo que este le decía.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— Deja ahí el arma, perdón…— añadió enseguida con una
irónica sonrisa— a Brigitte— mientras señalaba un rincón en el que había muchas
bayonetas apiladas— y ven a beber con nosotros— dicho esto se marchó hacia su
grupo de camaradas, que parecían ser los más ruidosos de todos los que se
encontraban allí.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— ¿Por qué lo invitas?— Preguntó uno de ellos cuando vio a
Misha acercarse de nuevo y observando cómo Mark llevaba su arma a un lugar más
alejado donde dejarla, para que no se confundiera con las otras— No se si te
has dado cuenta, pero está bastante loco.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— Ray, es de mala educación decir eso— Ante tal comentario
el aludido solo levantó una ceja incrédulo.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— No sabía que me había traído a mi madre a la guerra— Se
quejó.</div>
<div class="MsoNormal">
La carcajada de Misha fue lo único que obtuvo por respuesta,
ya que en ese mismo momento Mark se acercaba a ellos con una jarra de cerveza.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
El alcohol corría por la sala, al igual que el sonido de las
risas o el ego de los hombres inflándose jarra tras jarra. La bebida les hacía
decir más de lo que estando en su sano juicio habrían dicho, pero qué más daba,
mañana no se acordarían. Estaban en guerra, sí, pero en aquella sala solo había
esa noche un escuadrón, sin generales ni capitanes, solo ellos.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
— Y nos vamos a casar cuando vuelva— Decía casi a pleno pulmón
con una sonrisa embobada en el rostro y sin dirigirse a nadie en particular,
apoyándose en la mesa para no tambalearse bajo los envites de las cervezas que
ya llevaba en el cuerpo. En su mano, meciéndose, estaba el medallón con la foto
de la joven afortunada, era guapa, no se podía negar. A pesar de que la imagen
era en blanco y negro, a Mark le parecía ver los bucles de pelo negro como el
carbón, los ojos verdes y la piel clara, de todas las veces que Misha la había
descrito. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
De repente, una voz se escuchó por encima de todas las demás, que se callaron el instante.</div>
<div class="MsoNormal">
— No recuerdo que nadie diera permiso para montar esto— La voz del teniente era seria y se notaba enfadada— Os quiero a todos en vuestros puestos, aunque en el estado que estáis a los únicos a los que podréis pegar un tiro será a vosotros mismos. </div>
<div class="MsoNormal">
Una carcajada se escuchó en la sala y las miradas recayeron sobre Misha, el teniente, con un evidente instinto asesino en sus ojos señaló a Mark Llévatelo, ya hablaremos cuando sea capaz de coordinar la lengua y la sensatez.</div>
<div class="MsoNormal">
Mark se calló las quejas, poniéndose el brazo de Misha sobre los hombros y conduciéndolo hacia la salida, caminó con él casi arrastrándolo, hasta que se le ocurrió una idea y con una extraña sonrisa giró por una de las esquinas. </div>
Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-65368043324622213602013-06-14T11:59:00.001-07:002013-09-24T12:06:11.691-07:00Campanas para el caos.<div class="MsoNormal">
<h3 style="text-align: center;">
<i><span style="font-size: large;">"Τα παιχνίδια των θεών είναι επικίνδυνα για τον άνθρωπο."</span></i></h3>
<h3 style="text-align: center;">
<i><span style="font-size: large; font-weight: normal;">(Los juegos de los dioses son peligrosos para los hombres.)</span></i></h3>
<div>
<i><span style="font-size: large; font-weight: normal;"><br /></span></i></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">La manzana estaba sobre la mesa.
Simplemente se encontraba allí. Nadie sabía cuando había aparecido o si llevaba
en el frutero de plata con las demás frutas desde que comenzó la ceremonia.
Aunque eso era prácticamente imposible, pues un objeto así llama la atención: estaba
hecha de oro macizo y refulgía con luz propia destacando su posición, haciendo
que los ojos de todos los asistentes se fijasen en ella.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Todos estaban maravillados, menos
Tetis y Peleo que consideraban la aparición del áureo fruto como presagio de
algo terrible. Sabían perfectamente que la manzana no estaba allí al comienzo
de la celebración, ellos mismos habían organizado todos los manjares y la
ambrosía que disfrutaban los dioses Así que alguien, intencionadamente, la
había traído. Alguien perverso que había grabado en la dura piel una
inscripción ambigua y clara al mismo tiempo: “Para la diosa más hermosa”.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">¿Cuántas diosas habían acudido? Prácticamente
todo el panteón femenino: desde la salvaje Artemisa hasta la enigmática Hécate,
incluso Perséfone había dejado el Hades para asistir al enlace. Aún así faltaba
alguien, la única deidad rechazada hasta por los suyos, la única capaz de
arruinarlo todo incluso sin haber sido invitada: Eris, la diosa de <st1:personname productid="la Discordia." w:st="on">la Discordia.</st1:personname></span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Que ingenuos habían sido Tetis y
Peleo, pues confiaban en que si no convidaban a Eris todo marcharía a la
perfección, pero el caos es grande y llega incluso a los lugares más
recónditos. Nadie se libra de él, ni siquiera los dioses.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">La manzana seguía imperturbable
sobre la mesa, avergonzando a las demás frutas y deslumbrando a los dioses,
nereidas, ninfas, sátiros incluso al mismísimo Zeus que la miraban sin
parpadear. Y de pronto una figura avanzó bajo la atenta mirada de los
presentes. Hera se situó frente a la mesa mirando a todos directamente a
los ojos y dijo:</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Esta manzana me pertenece.
Alguien quiere hacerme un regalo y no se atreve a presentarse ante mí en
persona.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">“¡Oh no! Ya ha empezado.” Pensó
consternada Tetis mientras observaba la magnífica figura de la reina de las
diosas acercarse para coger el fruto…</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-¡No, Hera! Esa manzana es mía.
No por ser nuestra reina eres la más hermosa de nosotras.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">La voz de Atenea inundó el Olimpo
e hizo que Hera se detuviese en su propósito. Pero faltaba algo, la escena no
estaba todavía completa…</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Queridas- Dijo una voz melosa,
suave, fresca y cautivadora – No discutáis por algo tan sumamente obvio. La
inscripción deja bien claro que yo soy la única y verdadera propietaria de esa
manzana.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Afrodita se situó junto a las dos
diosas y las miró, como retándolas a desmentir sus palabras.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Afrodita, vete con tus juegos de
seducción a otra parte. ¿No te está Hefesto esperando impaciente en el lecho?.-
Ante esta provocación por parte de Hera los sorprendidos invitados reprimieron
la risa y trataron de disimular con ademanes absurdos que no le pasaron
inadvertidos a la diosa del amor que contestó airada.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Hera, puede que mi marido sea un
tullido, pero por lo menos me es fiel. ¿Cómo piensas reclamar esta manzana si
hasta el propio Zeus, teniéndote a ti como esposa, pasa más tiempo fuera de
casa retozando incluso con simples mortales?</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Afrodita, no hables de fidelidad
cuando ni siquiera la entiendes. Todos hemos sido testigos de tus pasiones con
Ares, no vengas a reclamar algo que no te mereces.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Vaya vaya, Atenea, la eterna
virgen. ¿Realmente creíste que alguien había pensado en ti al dejar la manzana?
Ingenua…</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-No hay forma de que resolvamos
este conflicto entre nosotras.- Sentenció Hera. –Necesitamos que alguien decida
quién es la más hermosa. Alguien lo suficientemente poderoso como para que su
veredicto sea irrefutable…</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-¿A quién propones pues?</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Una leve sonrisa se dibujó en los
labios de la reina y con el aplomo de quien ha ganado una guerra dijo:</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Zeus por supuesto ¿Quién sino?</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-¡Eso no es justo! No podemos
poner a mi padre ante tal tesitura.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-¿Tienes miedo Atenea? ¿Qué le
preocupa a la diosa de la justicia? Tal vez crees que el gran rey de los dioses
elegiría antes a su amada esposa que a su hija que lo único que le ha provocado
son dolores de cabeza, y nunca mejor dicho, pues de su testa naciste…</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">La sonrisa dejó de ser leve y se
convirtió en un gesto lascivo y punzante cargado de odio e ira hacia la hija de
su esposo.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Hera tiene razón, que Zeus
decida. Él mejor que nadie para reconocer la innegable belleza que poseo. No en
vano los hombres me consagran a mi la pasión y el erotismo y me veneran como la
única diosa del amor y el deseo.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Juntas se encaminaron hacia el
majestuoso trono de mármol negro desde donde el señor del Olimpo gobernaba el
mundo de los mortales con mano de hierro. Las tres diosas se quedaron al pie de
los siete escalones de oro que llevaban al sitial. Zeus, en lo alto, las
escuchaba petrificado pues no sabía como resolver la situación ya que
irremediablemente su decisión traería serias consecuencias que caerían sobre él
como un jarro de agua del Estigia. ¿Qué hacer? ¿Reconocer el atractivo
innegable de Afrodita traicionando así a su esposa y a su hija? ¿O contentarlas
a ambas engañándose a si mismo?</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Tras cavilar una respuesta que no
llegó se le ocurrió una solución que le eximiría de toda culpa.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Queridas, aquí no hallaréis
término a vuestro problema pues para mi sois igual de hermosas. Dejemos que
sean los mortales quienes decidan. A veces la simpleza de pensamiento de quién
sabe que en algún momento morirá es la respuesta más esclarecedora a cualquier
pregunta.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Hubo un momento de silencio en el
que las tres deidades se miraron íntimamente mientras Zeus rogaba que picaran
el anzuelo.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Está bien- Dijo Hera. –Pero
serás tú quien elija al humano.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">La tríada asintió y Zeus advirtió
como un peso se elevaba de su estómago y desaparecía. Sabía perfectamente a
quién designar para tan tremenda misión. A Paris, príncipe de Troya, hijo de
Príamo y Hécuba, un joven que vivía alejado de las pasiones de los de su
especie y cuya decisión sería totalmente imparcial.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Después de comunicarles el
veredicto a las diosas, estas se encaminaron a bajar al mundo de los mortales
guiadas por Hermes. Estaban decididas a defender su honor e iban
equipadas cada una con sus mejores armas de seducción.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Se encontraba Paris en una colina
cercana a Troya contemplando pensativo el mar cuando notó que algo había
cambiado, no sabía porqué pero percibía la atmósfera más pesada o tal vez eran
imaginaciones suyas… De pronto una voz le sorprendió a su espalda.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Hola Paris, futuro rey de
Troya.- Era la voz más atrayente que había oído nunca y cuando se dio la vuelta
para ver de donde procedía, su mente se colapsó por un momento y sus ojos se
negaron a creer lo que veían. Tres mujeres, que reconoció a la perfección, se
encontraban ante él rodeadas de una poderosa áurea blanquecina que difuminaba
sus cuerpos pero no impedía apreciarlos en todo su esplendor. La que comenzó
hablando siguió su soliloquio.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Sabes perfectamente quienes
somos. Hera, Atenea y Afrodita. Venimos porque necesitamos tu ayuda. Eres la
única persona capaz de despejar una duda que nos corroe por dentro y que
necesitamos resolver cuanto antes. Te la planteo ahora sin más demora, pues
cuanto antes contestes antes se acabará todo esto. ¿Quién de nosotras es la más
hermosa? Tomate tu tiempo si quieres, pero es necesario que sepas que tu
decisión tendrá una recompensa si me elijes a mí. -En ese momento la figura de
Hera pareció crecer, haciéndose más notable y mucho más imponente. – Si yo soy
la designada, ten por seguro que no te faltará el dinero, serás el hombre más
poderoso que exista en este mundo y todo el vasto imperio de Asia será tuyo.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Paris tragó saliva ruidosamente.
Sin parpadear observó como otra silueta avanzaba relegando a Hera a una segunda
categoría.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Querido príncipe, se justo en tu
elección, mas me veo obligada a ofrecerte algo como obsequio si me nombras a
mí. Yo, Atenea, diosa de la guerra, te ofrezco la victoria. Serás el ganador de
cualquier batalla a la que te enfrentes. No tendrás rival equiparable y tus
enemigos te temerán pues sabrán que si se enfrentan a ti la derrota es su única
opción.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">A todo esto Afrodita contemplaba
divertida los ofrecimientos de sus compañeras y esperó el momento exacto para
hablar, justo cuando Paris parecía decidido a dictar sentencia.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Yo simple y llanamente te
ofrezco lo que está en mi mano, el amor verdadero de la mujer más hermosa que
habita hoy sobre esta tierra: Helena de Esparta, casada injustamente con el rey
Menelao.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">La duda se instauró en la mente
del joven príncipe. Helena…la bellísima Helena de Esparta, la única mujer a
quién todos amaban en secreto y deseaban….</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Poder, victoria, amor… la
decisión era difícil pero estaba tomada.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Soy un simple hombre mortal y no
soy digno de entrometerme en asuntos de dioses, pero puesto que vosotras mismas
habéis acudido a mí yo os ayudaré como buenamente pueda. Mi decisión esta
tomada, para mí la diosa que merece la categoría de la más hermosa es, sin
ninguna duda, Afrodita, diosa de la belleza.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Atenea y Hera se quedaron
atónitas y en el fondo de su alma inmortal encontraron algo parecido a la
vergüenza. Se dieron la vuelta y comenzaron a andar mientras sus contornos se
desdibujaban y sus cuerpos dejaban que la luz los traspasase hasta que
desaparecieron irritadas.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">-Has sido sabio Paris y como te
he prometido, desde este mismo momento el corazón de Helena es tuyo.
Ahora será mejor que vayas a buscarla, pero ten cuidado con Menelao, pues
todavía él es su esposo.</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<br /></div>
<br />
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm;">
<span style="font-family: sans-serif, serif; font-size: 11pt;">Y Afrodita también desapareció
dejando a Paris con una inusitada sensación de soledad pero con el corazón
latiendo a mil por hora. Pediría a su padre que organizara un viaje a Esparta,
con la excusa de entablar relaciones de amistad con el país vecino, sería
entonces cuando seduciría a Helena para que se fuera con él y juntos
vivirían una historia de amor plagada de pasiones. Pero estaba el problema de
Menelao ¿Cómo se sentiría cuándo se enterase de que su mujer, la reina, se
había fugado con el príncipe de Troya? Seguramente ni le importaría pues era
conocido que no amaba a su mujer. Seguramente ni se molestaría en averiguar a
donde se había ido, seguramente…</span><span style="font-size: 13.5pt;"><o:p></o:p></span></div>
</div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><span style="font-size: large;"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></span></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-73613061171067945442013-05-27T14:23:00.001-07:002013-09-22T04:02:36.032-07:00Bienvenido a Raven's House. [I]<br />
<div class="MsoNormal">
[Primera parte.]</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Ahora que ya todo ha pasado, que la oscuridad ya no nos
persigue, creo que debería conocer la historia que me obligó a salir huyendo de
la mansión de mi querido tío Ferdinand. </div>
<div class="MsoNormal">
Se que es un hombre impaciente, pero este macabro relato
debe ser contado sin prisas pues los horrores que viví en aquella casa,
apartada de la civilización, necesitan tiempo para ser descritos.</div>
<div class="MsoNormal">
Coja ahora varios papeles y la pluma que guarda en su
portadocumentos pues si lo que venía buscando era algo sorprendente créame que
lo ha encontrado.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Bien, empecemos por el motivo que me llevó a visitar a mi
tío, al que hacía años que no veía y del que poco recordaba, solo lo que en la
familia se oye, sabe usted, sobre un familiar poco común: lo solitario y
excéntrico de su persona, la misteriosa presencia de su mujer de la que nada
parecían conocer, el deterioro de la mansión donde vivía, etc, etc, etc. Realmente
el tío Ferdinand era la oveja negra que toda familia importante tiene, el
eslabón más alejado del que se siente miedo y respeto al mismo tiempo. Yo,
personalmente, tenía una fascinación platónica por su persona, pues mi espíritu
es salvaje y no se acoge a moldes y mi tío parecía ser la misma clase de individuo.
Mas me equivocaba ya que Ferdinand era esto y mucho más.</div>
<div class="MsoNormal">
Pero no nos desviemos del comienzo, ya habrá tiempo para
desentrañar la personalidad de mi pariente. </div>
<div class="MsoNormal">
<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Por aquel entonces yo era joven y emprendedor, había
finalizado la carrera de Derecho con insuperables notas y me había incorporado
a un importante bufete de abogados, de los más prestigiosos de Londres. Los
casos llegaban y yo los ganaba, obtenía importantes ingresos que servían para
mantener las promesas que le hacía a mi querida Elizabeth de que algún día nos
compraríamos una gran casa apartada del mundo y pasaríamos los años juntos,
lejos de la capital, de la gente y de los asfixiantes lazos de mi familia. Todo
se desarrollaba bajo esta rutina hasta que un día recibí una misteriosa
llamada. Recuerdo ese día en especial porque fue el que desencadenó la serie de
grotescos sucesos que hoy me dispongo a contarle.</div>
<div class="MsoNormal">
Bien, como decía
recibí una llamada proveniente de Raven´s House (la mansión de mi tío que, como
puede percibir, hasta el nombre encierra oscuridad) y al otro lado de la línea
una voz, que manifestaba pertenecer al mayordomo de la casa, me decía que mi tío
requería de mis servicios. Como puede imaginarse mi sorpresa fue descomunal ya
que, como le he dicho antes, poco recordaba del tal Ferdinand y dudaba de
que él precisamente me recordase a mi. Pero la voz me explicó que mi pariente
estaba informado, gracias a que leía la prensa diariamente, de los casos que había ganado con anterioridad y pensaba que yo era la
persona idónea para realizar un importante trabajo y que además, al ser de la
familia, la discreción y la confianza estaban garantizadas. Pregunté, por
supuesto, en varias ocasiones sobre el asunto en el que tenía que trabajar pero
el mayordomo me daba evasivas y me instaba a trasladarme a la mansión lo antes
posible, donde sería tratado el tema con tranquilidad. Turbado y desconcertado miraba
a Elizabeth, que en ese momento se encontraba conmigo, que a su vez me miraba
sorprendida por las respuestas incongruentes y extrañas, como si de una absurda
conversación se tratara, daba a mi interlocutor. Por más que lo intentaba la
información que obtenía era escasa y siempre la misma: mi tío Ferdinand estaba
llegando al término de su vida y necesitaba, antes de morir, dejar unos asuntos
atados y aclarados y yo era la única persona que podía hacerlo. ¿Qué asuntos?
Si quería responder a esa pregunta tendría que desplazarme a Wellow, un pequeño
pueblo en la remota Isla de Wight a ciento seis millas de Londres, donde se
encontraba Raven’s House. Allí me esperarían el señor y su esposa a lo largo de
la misma semana. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Cuando colgué le conté a la sorprendida Elizabeth todos los
detalles del diálogo con el mayordomo y lo primero que me dijo es que ni se me
pasase por la mente acudir a esa cita tan extraña. ¡Qué cosas horribles podrían
sucederme en una alejada isla con un señor del que poco sabía y que lo que
conocía de él era cuanto menos enigmático!. Sus argumentos, ahora me doy
cuenta, iban cargados de advertencias sobre posibles peligros que yo desechaba
alegando que un miembro de mi propia familia no iba a hacerme ningún daño.
Ojalá hubiera escuchado, ojalá hubiera actuado sin seguir el impulso que me
llamaba a reunirme con mi tío. Pero bueno, ahora ya es demasiado tarde y solo
puedo ceñirme a los hechos. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Acepté sin dudar la oferta del mayordomo quedando en que al
día siguiente cogería el primer tren que saliera para Yarmouth y una vez allí
tomaría el ferry a Lymington donde me esperaría un coche que me trasladaría a
la mansión.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Después de discutir con Elizabeth sobre lo beneficioso que
podría resultar este asunto para mi carrera pues, creo que no lo he mencionado
antes, pero mi tío era un afamado cirujano ya retirado que había amasado una
gran fortuna lo cual significaba que mi tarea, seguramente, era encauzar o
dirigir ese dinero en el testamento lo que, si todo salía bien, me consagraría
como abogado familiar. Bien, pues después de toda esta retahíla de argumentos
convincentes comencé a buscar en mi estudio todos los papeles que podrían serme
útiles en Raven’s House, véase dosieres de casos parecidos en los que había
trabajado, algún que otro libro de leyes e incluso un testamento que guardaba
de unos antiguos clientes. Todo esto lo metía a prisa en mi bolsa de mano ante
la atenta mirada de mi prometida. Como no sabía exactamente los días que iba a
pasar en la isla metí abundante ropa en un baúl de viaje de mediano tamaño y lo
coloqué junto a la entrada pensado e incluso rogando que todas las prendas que
había colocado fueran excesivas para el tiempo que durase mi estancia allí. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Llegó la noche y acuciantes nervios me impedían dormir,
pensaba en lo rápido que había sucedido todo, en lo aburrido e insulso que se
presentaba el día hasta que la llamada del mayordomo hizo girar todo
trescientos sesenta grados. Reflexionaba sobre qué sería exactamente lo que mi
tío esperaba de mí y por otro lado me sentía extrañamente excitado por lo que
al día siguiente descubriría en la mansión, por fin analizaría con mis propios
ojos la aparente decadencia de la familia de Ferdinand y confirmaría o
desecharía todos los rumores que había escuchado desde que era niño.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Sonó el viejo reloj de cuco del salón indicando las siete de
la mañana. De un salto salí de la cama mientras Elizabeth, a mi lado, se
desperezaba para preparar el té matutino. Me duché y me afeité con el estómago
encogido por la emoción, me bebí el dulce té casi de un sorbo, agarré la
cartera con los documentos y cargué con la maleta. Me despedí de mi prometida
con un apasionado beso, casi como si fuera el último que nos diéramos en mucho
tiempo, y salí por la puerta repitiendo la misma cantinela de que estaría bien,
que escribiría todos los días y que trataría de volver lo antes posible. ¡Ay,
si llego a saber lo que al final del viaje me esperaba nunca habría cruzado esa
puerta! </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Me dirigí a la estación de tren donde cogí el expreso de las
ocho y allí me ocurrió el primer extraño episodio que daría pie a muchos otros:
Estando a punto de pagar mi billete, la taquillera me miró extrañada y me dijo:
“¿No tendrá usted intención de coger el ferry en Yarmouth verdad?” A lo que yo
respondí que ese era mi principal objetivo y pregunté, airado, el porqué de su
curiosidad: “No quiero entrometerme en sus asuntos” me dijo “Pero dicen que en
la Isla de Wight pasan cosas raras últimamente”. “Tonterías” repliqué yo
“Habladurías sin importancia, usted limítese a darme el billete no vaya a ser
que pierda el tren por su culpa”. Hasta yo mismo me sorprendí puesto que una
contestación tan brusca no suele ser propia de mí, pero los nervios me
atenazaban el estómago y un temor inexplicable comenzaba a embargarme lentamente.
</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Subí al tren no sin antes echar un último vistazo atrás,
como para retener en la memoria la
última imagen de Londres por si nunca volvía a pisarlo.</div>
<div class="MsoNormal">
Caía la tarde cuando el tren paró al final del trayecto.
Raudo y con la maleta a cuestas me dirigí al pequeño puerto para coger el
primer barco que partiese. Compré el ticket y me subí a la pequeña embarcación
de madera.</div>
<div class="MsoNormal">
El viaje era corto, pero el tiempo me engañaba alargando los
minutos, riéndose de mí haciendo que el trayecto se me hiciese interminable.
Una espesa niebla lo cubría todo, yo dudaba de cómo el capitán del ferry podía
ver por dónde íbamos ya que el mar parecía haber desaparecido bajo un manto
blanco.</div>
<div class="MsoNormal">
El Sol ya se había
ocultado y por fin, a lo lejos, divisé, no sin cierto pavor, el final del
viaje: el puerto de Lymington con su pequeño faro guiándonos entre la niebla
como moscas hacía la luz.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
El ferry escupió su carga y yo me encontré, cartera en mano,
en un camino de tierra frente a un coche del que se bajó el hombre más peculiar
que había visto en mucho tiempo: vestía un uniforme pasado de época y llevaba
el pelo cano peinado hacia atrás despejando su cara de rasgos afilados y
amenazadores. Su rostro surcado de mil arrugas decía muchas cosas acerca de su
vejez y sus años pero lo que más me sorprendió fueron sus ojos grises, fríos y
duros como el acero, pero aún así extrañamente serviciales.</div>
<div class="MsoNormal">
-Señor Howard, bienvenido a la Isla de Wight, su tío le
espera.- No pregunté cómo había sabido que era yo la persona a la que buscaba,
tampoco pregunté el porqué de un coche tirado por caballos en vez de las
maravillas de vehículos a motor que se vendían desde hacía algún tiempo,
simplemente me subí a la parte de atrás del anticuado, aunque lujoso, carro y
me encaminé hacia Raven’s House…</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-57081017173868829972013-05-23T14:36:00.001-07:002013-09-22T04:01:54.342-07:00Un diario en las trincheras. [I][Primera parte.]<br />
<div class="MsoNormal">
<br />
<br />
Cargar, apuntar, disparar, correr, esconderse, cargar,
apuntar, disparar, correr, esconderse, cargar, apuntar, disparar, correr,
esconderse… ese era el ciclo eterno al que se encontraban sometidos los
soldados, y como banda sonora, para alentarles a continuar la lucha, se
escuchaban los cañonazos y el sonido de las bayonetas al clavarse en la carne,
todo un deleite para los sentidos de las personas que allí se encontraban. Quizás,
viendo esta escena, Rousseau se hubiera pensado más el decir que el ser humano
es bueno por naturaleza. </div>
<div class="MsoNormal">
En el campo de batalla trozos de tierra saltaban
continuamente, por el impacto de los proyectiles, y el terreno que no estaba
cubierto por cuerpos, tanto de aliados como de enemigos, presentaba el color
granate de la sangre al mezclarse con la arena y hacer un macabro barro. Pero
está bien, esa horrible visión ya era el pan de cada día, se había convertido
en algo que los acompañaría de por vida, incluso sin vencían y conseguían
volver a casa, sabían a ciencia cierta que todas las noches volverían a estar
allí, peleando, con el olor de la pólvora entrando por sus fosas nasales y el
peso de sus armas en la mano derecha, pero todo por la patria, por defender los
colores de una bandera. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Poco a poco cada soldado se ha ido retirando a su base,
parece que hoy no ha conseguido avanzar ninguno de los dos jugadores de este
ajedrez gigante, y solo han perdido vidas, quizás cientos de ellas, gastadas
inútilmente.</div>
<div class="MsoNormal">
<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Mark estaba sentado, con la espalda apoyada en una de las
paredes de tierra, manchándose el uniforme, pero ese era el menor de sus
problemas, con la vista fija en la pared contraria, gastaba sus minutos
limpiando con un viejo y sucio pañuelo el arma que siempre le acompañaba. Los
sonidos de pasos y los gritos de unos militares a otros no conseguían que el
soldado reaccionara, cosa que no parecía importarle mucho a los que caminaban,
e iban de un lado a otro, pasando por delante de él, la mayoría cargados con
cajas, los últimos restos de municiones, armas y vendas. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Levantó la vista cuando un joven corriendo, con una de esas
cajas en las manos, le golpeó en el pie, este no se detuvo a disculparse y
simplemente siguió a lo suyo. Mark miró su arma como si lo hiciera por primera
vez en mucho tiempo, y al ver que ya estaba limpia, se ató el mugroso pañuelo
alrededor de la reciente herida que se había hecho, apenas unos días atrás,
algún que otro medico militar ya lo había regañado por hacer eso, pero su
respuesta siempre era la misma <i>“Si no tengo mi arma preparada moriré aquí, solo
así tengo alguna oportunidad de volver a casa”</i> ¿Pero de verdad quería volver a
casa? No, realmente no, no le esperaba nadie allí donde fuese, hacía tiempo que
había perdido su familia, y quizás por temor, nunca pensó en formar una nueva,
y así estaba ahora él, un soldado que no le importaba a nadie, en mitad de una
guerra que le daba igual y sin nada que perder.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— ¡Soldado!— Gritó de repente una voz autoritaria, que hizo
que Mark levantara la vista alarmado después de haberse atado la venda.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Su mirada se relajó al darse cuenta de quién era— Misha— Se
quejó— ¿Qué quieres?</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— No puedes pasarte aquí toda la noche… otra vez— Cruzó los
brazos sobre el pecho, en esos momentos no llevaba el arma— Ven a beber, antes
de que se acabe lo que queda.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— ¿Y qué celebramos?</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— Que llueve, que no llueve, que hace sol, que está nublado,
que ganamos, que perdimos… Elije— respondió con una sonrisa, que Mark no sabría
definir si era macabra o sarcástica.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— Prefiero quedarme aquí con Brigitte— Fue lo único que dijo
dando por terminada la conversación.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
— ¿Brigitte?— Cuestionó extrañado— ¡Oh! Ya, tu dichosa arma—
Suspiró exasperado— Si trataras a una mujer de la misma forma en que tratas a
tu bayoneta no tendrías problemas en conseguirla— El silencio se hizo entre
ellos y cuando Misha vio que no iba a responderle, se dio la vuelta,
marchándose por donde había venido con un fuerte resoplido.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-40356557876887976172013-05-16T13:10:00.000-07:002013-05-16T13:10:00.631-07:00¿Un discurso para una vida?<br />
<div class="MsoNormal">
Quizás debamos observar a nuestros amigos y ver cómo han
evolucionado, o más importante, como hemos crecido con ellos, gracias a ellos.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Aceptar que el tiempo pasa, que no somos imperecederos, que
la vida no se va a repetir, que es única.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Contemplar nuestros fallos y nuestros aciertos, nuestras
aventuras y desventuras, nuestros momentos de mala o buena suerte.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Es el momento de aceptar las despedidas que al fin y al cabo
son algo necesario para que haya un nuevo comienzo, ni mejor ni peor, solo
diferente.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Es el momento de hacer planes nuevos, de destrozar los
antiguos.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Es el momento de romper moldes y de abrirnos a nuevos
encuentros que rompan los nuestros.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Creo que es el momento de dejar de preguntarnos el porqué de
las cosas y empezar a preguntarnos ¿Por qué no?</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-83478071093227918582013-05-05T11:07:00.000-07:002013-09-22T04:03:01.346-07:00Bono Morti Sociedad Anónima.<br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
El edificio
aparentaba normalidad. Era la clase de edificio aburrido con oficinas aburridas
dentro y trabajadores muy muy aburridos que tomaban café o entraban en facebook
sin que el jefe les pillara. La fachada era insulsamente blanca, con grandes
ventanas que, por un extraño efecto óptico, no dejaban ver nada de lo que ocurría
en el interior. Un gigantesco letrero de metal ligero rezaba en letras rojas: “La
solución está aquí. No busque más, Bono Morti S.A es la respuesta.”</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Un hombre
ataviado con un elegante traje y portando un maletín negro en la mano se detuvo y
leyó el cartel. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bien,
parece que es aquí.- Dijo soltando un suspiro típico de la persona que tiene
algo que hacer y que no le agrada en absoluto.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Se acercó
decidido a la puerta de entrada y la abrió. Dentro se podía haber celebrado
perfectamente un funeral o cualquier acto que requiriese ambiente de luto pues
el silencio imperaba sobre todas las cosas. No era un silencio amargo, ni uno
de esos silencios incómodos que se generan entre dos personas que hablan y
fingen al mismo tiempo, sino más bien un silencio vacío, un silencio propio sin
el cual te sentirías extraño o incluso incompleto. El hombre lo notó y un
escalofrío recorrió su espalda. Sus ojos se posaron lentamente sobre lo que
parecía una salita de espera bastante poco trabajada: apenas cuatro sillas, una
mesa comprada por piezas y montada lo más torpemente posible y una planta seca
y marchita. Luego desvió la mirada hacia el otro lado y descubrió dos figuras,
un hombre y una mujer, que hablaban en susurros detrás de un mostrador.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Mira, un cliente.-
Decía el de género masculino a su compañera en tono emocionado.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Ya, y este
déjamelo a mí ¿eh?.- Contestaba ella.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
El hombre
trajeado se acercó y dijo:</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Hola,
buenos días. Vengo a…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Hola,
hola!- Dijo la mujer antes de que el otro acabara de presentarse. Y casi
saltando por encima del mostrador se plantó frente al sorprendido hombre. -¿Qué
tal todo? Bueno, que pregunta más absurda ¿no? Jajajaja. En fin, yo soy Evelyn y
este de aquí Thomas. Nos alegramos de que haya usted venido aquí. Vamos a ayudarle
en todo lo que podamos, usted no tiene que preocuparse por nada…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-No, si yo
solo venía a por…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Si, si! Lo
sabemos, por eso estamos aquí. Ha hecho lo correcto, contratar nuestros
servicios es lo más sensato. Bien, y ¿Qué tipo de suicidio podemos ofrecerle?.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿¡Cómo
suicidio!? ¡Pero oiga…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bueno,
bueno. Nosotros preferimos llamarlo Solución Definitiva, ya sabe, más poético
¿no? Jajajaja. Somos una empresa líder en este sector, quizá se deba a la poca
competencia que tenemos, no sé, quizá…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Evelyn
hablaba enérgicamente, casi sin dejar espacio entre las palabras. Había
encontrado un cliente y estaba dispuesta a hacer lo que fuera para que no se
marchara como los cincuenta últimos. Tal vez les asustó el precio… bueno, pero
desde entonces ya los habían bajado.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Oiga señora…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Llámeme Evelyn.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bueno, Evelyn,
yo no sé qué es esto de la Solución Definitiva ni quiero tener que ver en absolutamente
nada, yo solo he venido a…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Pero vamos
a ver ¿No siente la necesidad de quitarse la vida? Seguro que hay algún
problema que le atormenta enormemente y por eso estamos nosotros aquí.- Una
sonrisa complaciente iluminaba su cara. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-No la verdad
es que no. Mi vida es bastante buena…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿Nada? ¿Su
mujer no le engaña? ¿Su trabajo no es absolutamente nefasto? ¿Ni siquiera su
perro se hace pis en la alfombra y no puede hacer nada para evitarlo?</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-No, no
tengo perro…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bueno, la
primera fase es la negación…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Pero yo
solo he venido, como llevo rato intentando decirle, a…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-A acabar
con sus problemas claramente, le hemos visto leyendo el cartel de fuera. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿Ah si?- Es
lo único que alcanzó a preguntar, su mente era un mar de dudas, todo estaba
sucediendo demasiado rápido y él nunca había sido una persona avispada con lo
que le costaba reaccionar ante situaciones de este tipo.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿Bonito eh?
Aún así no atrae a mucha gente, creo que debería ser más grande. ¡Thomas!- El
interpelado sacó la cabeza de detrás del mostrador rápidamente, asustado. –El cartel
tiene que ser más grande, te lo he dicho mil veces.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿Eh? Si,
si, no te preocupes mañana lo amplío.- Y volvió a sumergir la cabeza tras la
barra. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bueno,
bueno. ¿Y cuál es su nombre señor?. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Mmmm,
Henry, me llamo Henry.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Oh, que
nombre más bonito! ¡Quedara perfecto en la lápida, ya verá!</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡¿Cómo en
la lápida?!</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Claro,
claro. Aquí nos gusta rematar el trabajo, es nuestro sello de identidad.
Tenemos una funeraria asociada.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Oh, que
previsores.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿Verdad qué
si? Bueno, vayamos a lo que nos importa. Contamos con numerosos tipos de
suicidio: suicidio Clásico, Artístico, Feliz, Dramático… Aquí le dejo unos
folletos, vaya a la sala de espera y écheles un vistazo.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Pero yo…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Ya, ya.
Usted mírelos, ya verá cómo cambia de opinión en seguida. Mientras tanto aquí
le esperaremos.- Y la sonrisa nunca se iba de su rostro, estaba realmente feliz.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Henry se
sentó en una de las sillas, y pensó. Al cabo de un rato volvió al mostrador con
los ojos rojos y la nariz hinchada.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Mi vida es
una mierda!- Se desplomó sobre el cristal y comenzó a llorar a lágrima viva.
-¡No tengo nada! ¡Odio mi trabajo, no tengo mujer y dudo que alguien alguna vez quiera casarse conmigo, si casi ni tengo amigos!- Las lágrimas se derramaban empapándolo
todo.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bueno, por
eso estamos nosotros aquí, ¿Ha decidido ya señor Henry?</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Si, los
quiero todos, quiero morirme!</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Bien, el
completo entonces. Serán novecientos euros. ¿Cómo piensa abonarlos?</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Tome!- Y
tiró la cartera contra el mostrador- ¡El número de la tarjeta es uno, dos, dos,
uno! ¡Qué vida más triste! </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Perfecto,
si es tan amable de acompañarme…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Evelyn guió
a Henry hasta una puerta tras la cual se escuchaban ruidos estridentes, como de
cuchillas girando a gran velocidad o taladros puestos a máxima potencia. Henry
dudó un momento de si realmente no sería una empresa de albañilería encubierta…
Qué tontería, ¿Para qué iba a querer un albañil esconderse?. Pensado esto cruzó
la puerta y no volvió a salir de allí jamás. Evelyn retornó a su puesto de
recepcionista junto a Thomas.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Buena caja
hemos hecho hoy ¿eh?.- Dijo Thomas tecleando en el datáfono el número secreto de
la tarjeta.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Por cierto,
¿Sabes quién era ese? Porque a mí me sonaba un montón…</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Claro! Era
el cobrador del banco, debemos seis meses de agua y de luz.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Ah!</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Y otra vez
el silencio lo envolvió todo, así hasta que entrase algún otro cliente.<br />
<br />
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-84111170583018741882013-05-01T11:47:00.001-07:002013-09-22T04:00:57.422-07:00Tótem.<br />
<div class="MsoNormal">
Noche negra sobre un campo verde. Árboles que hacen guardia
impertérritos en la oscuridad. Animales que guardan sus vidas en madrigueras o
cuevas esperando la llegada del nuevo día. La luz de la Luna, plateada, pura,
limpia, se derrite por todo el extenso bosque que duerme. Todo es paz y
tranquilidad, pero no solo animales y plantas viven en él, los humanos
comparten el mismo espacio que estas criaturas en absoluta armonía. Hombres y
mujeres que viven en un poblado de apenas cuatro chozas de paja y adobe, vistiendo
con prendas confeccionadas a mano con cáñamo, lino o algodón, con una jerarquía
política muy diferente de la nuestra, simple y sencilla en apariencia pero con
el trasfondo de la tradición avalándola.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
El fuego se
alza en medio del poblado, lamiendo con sus llamas la madera que sirve de
combustible y arrojando una luz rojiza que compite con la argentada de la Luna.
Los indígenas se reúnen en torno a esta hoguera formando un círculo, y es Tayel,
el jefe de la tribu, el que habla.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Hoy la
noche es más oscura, sombras temibles de nuevos Dioses nos acechan. Más unidos
que nunca hoy debemos estar. El Chamán ha visto cosas en las entrañas de los
animales y lo que ha visto bueno no parece. Hermano Surem, que tu voz se oiga
ahora y que todos sepamos a lo que nos debemos enfrentar.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Al lado de Tayel se encuentra un anciano
enjuto y demacrado, con el rostro surcado por mil arrugas y rasgos afilados,
con la nariz atravesada por una fina caña de bambú.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡Hermanos
todos somos!- Su voz, azuzada por miles de espíritus antepasados, inunda el
poblado y se extiende por todo el bosque.- Hoy Maman Brigitte, nuestra gran
diosa del ciclo vital, me ha enviado visiones que esclarecer no puedo. En las
entrañas de los pájaros vi la muerte de nuestra pequeña civilización. –Al decir
esto miles de murmullos se extienden entre los habitantes de la tribu, pero
Surem los hace callar a todos con un simple gesto de la mano. –Hombres vendrán
y nos destruirán, altos y con extrañas ropas cubriéndolos. Con artilugios misteriosos en sus manos capaces de causar la muerte de varios de nosotros. –Esta
vez no hay ningún murmullo. Un niño de cabello negro como el carbón da un paso
al frente y mirando desde su pequeña altura directamente a los ojos del gran
chamán dice: </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Poderoso
Surem ¿Nuestros Dioses abandonarnos han decidido?.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Pequeño
Tsijiari, nuestros Dioses son y dejarán de ser, pues el mundo de fuera
avanza. Nosotros nos reuniremos con
ellos allá en el Otro Mundo. Allí impacientes nos esperan.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
EL niño baja
la mirada y comprendiendo al fin el destino que le espera a él y a toda su
familia vuelve con los demás, resignado. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Hermanos,
no debéis sentir temor. –Prosigue el chamán- Vivimos aquí desde hace muchas
Lunas. Nuestros antepasados duermen en cada árbol y cada piedra y aquí seguirán
cuándo nosotros nos marchemos. El mundo de afuera peligroso es y ahora viene a
matarnos, pero gracias a eso ese mundo nos conocerá y así nuestra tradición
jamás olvidada será. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¿Y qué
dioses tan poderosos son los que acabarán con los nuestros?- Tayel habla preocupado,
desea saber, conocer, vislumbrar la respuesta, el porqué de todo lo que viene.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Por raro
que ahora os parezca, no son dioses, sino dios. Desconozco cuál es su verdadero
nombre, solo sé que así lo llaman simplemente las personas que en él creen:
Dios. Y este es su símbolo. –Se agacha con dificultad oyendo como los huesos de
su estropeada espalda crujen por el esfuerzo. Coge dos largos palos y los
superpone formando una cruz, la alza para que todos la contemplen. Ante la visión del símbolo maldito los indígenas
se tapan los ojos horrorizados.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-¡¿Cómo un
simple dios sin nombre es capaz de derrotar a los padres de la tierra, a los
que crearnos decidieron?!- El jefe de la tribu grita furioso al pacífico anciano.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
-Tayel, más
poderoso ahora Él es pues los hombres extranjeros le dan valor. Desea alzarse
contra todos los dioses y dominar. Mas así ha de ser, pues somos muy pequeños y
el mundo muy grande. Ahora hermanos, despidámonos de la tierra.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Y juntos
comienzan un canto qué inunda la selva. Los animales escuchan expectantes
pues están unidos con la tribu. La lluvia comienza a caer mojando el suelo
habitado por miles de espíritus. La lluvia les trae algo más que humedad, pues
las gotas, al mojar sus cuerpos, les hacen caer en un sueño profundo del que
jamás regresarán.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Así son las
guerras de los Dioses: para que el mundo avance Ellos deben pelear en épicas
batallas. Unos caen y con ellos muere una civilización, pero así otra nueva se
impone y el mundo se renueva. ¿Qué Dios o Dioses surgirán en el futuro? Nuestro
único Dios redentor también se verá derrotado en algún momento, y será entonces
cuando hombres nuevos, armados con la palabra de otras Deidades, gobernarán la
tierra relegando nuestras creencias a simples mitos y leyendas ficticias. Y nadie puede impedirlo, pues así es como el mundo ha sobrevivido durante millones de años y de la única manera que puede seguir haciéndolo.</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-10699528820177730832013-04-16T11:48:00.001-07:002013-09-22T04:03:20.044-07:00Tierra virgen y madera tallada.<br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Los picos se
alzan hasta el cielo y caen con furia quebrando la roca. Las manos que los
empuñan son negras y están llenas de cicatrices. Las piquetas vuelven a
levantarse todas juntas y descargan un único golpe que estremece la tierra. Las
piedras desprendidas ruedan colina abajo huyendo de sus agresores. La nota
disonante de las herramientas al golpear
es acompañada por una melodía de cadenas arrastrándose, cadenas que unen pies
de caoba y que los atan uniéndolos a todos en un único ser. El Sol inclemente
calienta furioso las pieles quemadas y estas contestan derramando gotas de
sudor que se pierden entre las múltiples manchas de cientos de camisas roídas. </div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
El restallar
de los látigos compone el punto final de esta melodía. Chasquidos roncos que
van acompañados de gritos de dolor. Sangre en la tierra virgen, escarlata en el polvo.
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Las heridas se abren, pero no solo las del cuerpo, las de la
mente, incurables, se instalan en los esclavos. Muchos caen, derrumbándose como
la piedra partida: sus cuerpos negros y robustos desplomados sobre un suelo
ardiendo. Es en ese momento cuando los oficiales temen por la integridad del
grupo, tienen miedo de que alguna de las manos suelte el pico y cese su actividad
presa del pánico por la presencia de la muerte. Por eso corren a donde está el
fallo, abren la cadena y arrastran el cadáver fuera de la vista de los demás,
dejando un surco en el suelo arcilloso. Pero los demás ni se inmutan, solo
sienten envidia por el que acaba de morir y rezan porque sea eso lo que les pase
a ellos en ese mismo momento.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Los ojos, del mismo color que la piel, están inyectados en
sangre. Las finas partículas de tierra que forman nubes se les introducen en el
iris provocando la salida de simples lágrimas. No son lágrimas de dolor, ni de
pérdida, ni de nada, eso ya quedó muy atrás.</div>
<div class="MsoNormal">
<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
El marrón del cuerpo
es adornado ocasionalmente por colores más intensos, como el morado provocado
por los golpes o el rojo de la carne abierta y supurante provocado por los
latigazos.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Corazones lacerados laten todos juntos, pues saben que solo
ese sonido les une. Las cadenas son demasiado frías para transmitir
sentimientos y los eslabones demasiado ariscos para permitir el paso de alguna
sensación que pueda ayudar al compañero.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Las mentes abotargadas por el calor y confundidas por las
alucinaciones buscan, anémicas, algún retazo de vida pasada. Hay veces que el
rostro de cierta mujer aparece en una de ellas o el de un niño sonriente,
incluso el de un perro con la lengua fuera. Pero de pronto el pico vuelve a
besar la piedra produciendo ese sonido roto y las figuras se desvanecen como el
polvo en el aire.<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Obediencia, sacrificio, escoria, muerte, negros, basura,
sangre, dolor, castigo, ley, son las palabras que la unidad es obligada a
escuchar día tras día y con las que conviven intentando recordar si existían términos para
describir cosas buenas o si son simplemente sueños incoherentes fruto del
cansancio y el agotamiento.</div>
<div class="MsoNormal">
… </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
De pronto la psique dormida de algún esclavo despierta y
observa a su alrededor: ve que su mano, aunque parece ajena a su propio cuerpo,
sujeta una herramienta capaz de hacer llorar a la tierra, mira sus pies sangrantes
rodeados por el gélido hierro, luego observa a uno de los oficiales que se
encuentra casi al final de la fila golpeando a algún compañero. Todo esto es
procesado muy lentamente, el brazo se alza mientras las gotas de sudor caen al
suelo, los ojos se mueven rápidamente de un lado a otro, todo parece estar
sucediendo muy lejos, otro negro que está a su lado lo mira incrédulo y
entonces, al cabo de un segundo, se oye un ruido metálico muy poco usual y los eslabones
huraños se desparraman por todos lados a la vez que el pico se clava en la
tierra de manera muy diferente a como suele hacerlo.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Todo sucede muy deprisa, un oficial viene corriendo, en la
cara la expresión del terror escéptico, blandiendo el conocido látigo y lo
descarga con furia contra el cuerpo esclavo. Pero algo poco común sucede y es
que el ser que parece haber recobrado la conciencia no parece sentirlo a pesar
de que la fusta muerde su piel rasgándola en inhumanas heridas.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
El compañero que lo miraba no ha tardado en darse cuenta de
lo mismo y hace algo parecido, solo que esta vez la tierra no siente la
picadura del hierro pero si la calidez de la sangre. El oficial cesa en su
empeño por devolver al esclavo a su sitio y cae al suelo con medio pico atravesado
en el cráneo, el mismo suelo que acogió al otro negro en la muerte ahora lo
espera a él.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
Sin demora vienen más oficiales pero la unidad
entera está ahora libre… ¡Libre! ¡Libertad! ¡Aun quedan palabras para describir
cosas buenas, nunca han desaparecido!<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Los negros se mueven rápido a pesar del agotamiento y las
herramientas que les dieron como castigo por su color de piel son ahora las que
les salvan del calvario.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
En el caldeado ambiente se crea una melodía nueva. Notas
fuertes de cadenas al romperse se mezclan con el contrapunto de huesos al
quebrarse. El acero contra el acero aporta la cadencia necesaria y todo se une
voluptuosamente con los gritos de libertad que profieren esas bocas de gruesos
labios que fueron obligadas a callar para siempre.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-87049335279776388092013-04-13T09:48:00.000-07:002013-04-15T09:32:09.485-07:00Ave atque vale.<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<u><b>Inspirado en Jem y Will "La princesa mecánica"- Los Orígenes por Cassandra Clare</b></u></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Tu habitación está desierta, hermano, el sonido de las notas,
que tan maestramente creabas, se encuentra apagado, y el violín en un rincón
olvidado del oscuro salón en el que ya nunca más te veré sentado, aunque el
fuego que nos tumbábamos a contemplar parece no notar nuestra falta. Tu
ausencia pesa, duele más que las heridas con las que he tenido que cargar
durante toda una vida, y aún así oigo, irónica, tu voz en alguna parte de mi
cabeza, aconsejándome, guiándome, tomando la forma de una estrella lejana que
nunca más podré alcanzar. Te vas a la oscuridad, a vivir solo, a un lugar donde
los huesos son tu única compañía, abandonas el bando de los vivos para
protegernos, para habitar en la delgada frontera con los muertos, sin alcanzar
nunca ese estado. Ahora no perteneces a ningún mundo, los dos te han dado la
espalda. Y resulta irónico, que aún así, tú vayas a vivir más que yo, pero es
tranquilizador saber que aunque pasen años tras mi muerte, serás tu el que
continúe allí donde yo lo dejé, el que triunfe donde yo fallé, el que se
levante donde yo caí, el que grite donde yo me callé… pero el que ame lo que yo
amé. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Tu habitación está desierta, hermano, hasta que puedas
volver, y desalojes de cada esquina el frío que ha hecho de ella su hogar y su
morada. </div>
<div class="MsoNormal">
Tu habitación está desierta, hermano, hasta que la rueda de
la vida se cierre por fin. </div>
<div class="MsoNormal">
Tu habitación está desierta, hermano, pero solo me queda una
cosa por decir, por y para siempre; <i>ave atque vale</i>.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-47096360710892967962013-04-03T11:37:00.002-07:002013-09-22T04:03:39.332-07:00Cacofonías del mar Muerto.<br />
<div class="MsoNormal">
Las olas se arrastran por la arena, clamando al cielo no
volver al mar. Los acantilados observan de cerca, alzando sus paredes cubiertas
de sal hasta tapar el sol. Pequeños animales marinos, los crustáceos que
consiguen vivir aquí, quedan varados en la orilla y mueren.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Ella se mueve entre el agua. Aparta el líquido trasparente
con los brazos mientras sus pies luchan por avanzar y poco a poco van notando
que se elevan. El pelo azul, tan oscuro que el negro pugna por colorearlo, se desborda
por su espalda y continúa en el agua. Los ojos vidriosos y completamente verdes,
sin distinción alguna entre iris, pupila o esclerótica, se fijan en el
horizonte viendo más allá de todo. La piel, escamosa y resbaladiza, es como un
manto níveo que cubre un interior vacío movido simplemente por la fuerza del
espíritu. Las manos, de dedos largos y estilizados, se hunden en el fluido y lo
obliga a retroceder, aunque luego vuelve a retomar su posición.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Miles de cuerpos flotan insensibles en el agua, unos boca
abajo, otros boca arriba, algunos de costado, pero ninguno logra hundirse. Los
ojos abiertos o cerrados, la cara con la misma expresión de terror. Un reto
supone el identificarlos ya que nadie son y poco importan. El agua de este mar
se introduce por las regiones de sus cuerpos que le dejan paso e inunda sus
interiores estáticos mezclándose con sangre y vísceras. </div>
<div class="MsoNormal">
<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Parece que ella consigue sumergirse en el agua, bucea y se
desliza en su interior con los ojos abiertos, sin importarle aparentemente el
daño que la sal pueda causarles. Sale a la superficie, rompiendo como una
sirena la constante quietud del fino velo que diferencia el interior del
exterior. Ahora junta sus manos y las convierte en un pequeño y delicado tazón
con el que coge agua y se la lleva a la boca, da un largo sorbo y luego otro…
No ocurre nada, lo que el organismo de cualquier persona normal no hubiera
tolerado a ella parece que le sienta incluso bien. Pero recordemos que ella no
tiene organismo que pueda matarla, ella esta vacía por dentro…</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Los cadáveres siguen flotando, quién sabe quizá a ellos si
les mató el agua. Sin darse cuenta un cuerpo roza el brazo de la mujer que
nada, ella se gira lo ve y sonríe.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
-Os dije que algún día pasaría y nadie me escuchó. Os hice
miles de advertencias y nadie las oyó. Siento que esto haya tenido que acabar
así, pero no diréis que no os lo advertí. Ahora ya no podréis seguir matándome.
</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
La Madre Naturaleza
sigue nadando indiferente a todo y de pronto los cuerpos se duplican, ya no son
miles, sino millones y cubren la totalidad del mar donde nos encontramos. La
humanidad flota en el agua, sin rumbo, puesto que no lo necesita ya. El fluido
que les dio la vida es ahora el que los acoge en la muerte. Una muerte conocida
por todos y atraída lo más rápidamente posible.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
¿Y quién es, finalmente, el ganador de esta guerra absurda?</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a> </div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/02740462726142560569noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2620047955555148701.post-42052163141063674092013-04-01T09:24:00.003-07:002013-04-01T09:25:19.129-07:00La simplicidad de pintar un cuadro...<br />
<div class="MsoNormal">
Te observo, te admiro, resaltas en el acantilado, donde la
silueta de tu cuerpo parece un faro, desafiando al mar, a las rocas, al viento,
a que te derriben si es que pueden. Tu boca es como el clima, variable, nunca
se sabe cuando curvarás las comisuras hacia arriba, resaltando el rubor de tus
mejillas o cuando, enojada, tus labios se mantendrán firmes como si de un
puente se tratara, sin embargo no puedo separar mi vista de ellos, de su
perfección como si de panales de miel se tratase, de su mortal hermosura.</div>
<div class="MsoNormal">
Tus ojos parecen haber sido pintados con humo, grises, como
recuerdos que se conservan de un viejo sueño ya pasado. El cabello rojo,
desordenado y llevado por el viento, parece el huracán que aporta ferocidad a
tu inocente rostro. Ferocidad e inocencia, dos palabras contrarias, dos
significados, dos épocas del año pintadas en un mismo cuadro.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Cuando coges aire para respirar, tu pecho se eleva al cielo
como un ave que quiere volar, sobrepasar las fronteras de la realidad, y es entonces
cuando mis palabras como notas musicales, se elevan al cielo implorando tu
liberación, pero también deseando que el primer nombre que aparezca escrito en
la hoja blanca que es tu corazón sea el mío.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nd/3.0/deed.es_ES" rel="license"><img alt="Licencia de Creative Commons" src="http://i.creativecommons.org/l/by-nd/3.0/80x15.png" style="border-width: 0px;" /></a></div>
<br />Cheshire Cathttp://www.blogger.com/profile/18298313044607585092noreply@blogger.com0